Salvador Illa, líder socialista de la oposición, ha presentado este domingo su "govern alternativo" con una iconografía que aspira a los aires oficialistas de la Generalitat. El escenario escogido por los socialistas ha sido el Palau Requesens, que ha servido de reproducción del Palau de la Generalitat. Illa ha bajado las escaleras del patio interior del palacio gótico y se ha dirigido con solemnidad a un atril preparado con el "logo" creado por los socialistas que emula de forma tosca el blasón del gobierno catalán.
El govern alternativo se ha reunido antes de la presentación, al más puro estilo oficial. Los 15 consellers, los dos comisionados y la secretaría de gobierno han mantenido una reunión en el Palau con el líder socialista. Illa no ha hecho referencia a la reunión en su discurso, el cual ha hecho dos veces, en catalán y castellano. Una vez acabada su intervención el socialista no ha respondido preguntas, ha agradecido los aplausos y se ha marchado por donde ha venido entre las aclamaciones de los asistentes.
Más allá de la performance el discurso de Illa ha reiterado el tipo de oposición que hace días que expone que hará. También ha aprovechado para resaltar el interés del PSC por la ampliación del aeropuerto del Prat. La convivencia, la cooperación y el diálogo han sido los grandes protagonistas de la presentación de Illa. El líder socialista ha asegurado que: "Los miembros del gobierno alternativo tenemos la ambición de trabajar desde la suma".
Illa ha insistido en la voluntad en hacer una oposición de entendimiento, que busque establecer puentes con el Govern de Pere Aragonès, ya que según el socialista: "Vivimos un tiempo con retos extraordinarios y una buena oposición ayuda a hacer un buen gobierno". El líder de la oposición ha ofrecido cuatro grandes pactos al Govern de la Generalitat que incluyen acciones que van desde combatir la pandemia, los fondos europeos o una remodelación de los medios públicos catalanes.
Las alternativas socialistas
El concepto de gobierno alternativo o ejecutivo en la sombra no es nuevo. Se trata de una práctica relativamente común en la política anglosajona que Pasqual Maragall importó a Catalunya el año 2000, cuando era líder de la oposición. Algunos de los consellers en la sombra de Maragall acabaron ocupando sillas en la primera legislatura del tripartito.
Salvador Illa ya ha anunciado a los 15 consellers que fiscalizarán el trabajo del Govern de la Generalitat. Además contará con dos comisariados y una secretaría de gobierno. Illa ha publicado en sus redes sociales la composición de su ejecutivo.
Las conselleries del govern alternativo no se corresponden con la actual repartición del gobierno de ERC y Junts. Entre los nombramientos más destacados se encuentran el de Alícia Romero, quien seguirá la conselleria de Economía y aspectos de Hacienda y Sociedad del Conocimiento, Ramon Espadaler, siguiendo la conselleria de Interior, y Eva Granados, al frente del Comisionado de Presidencia para la Catalunya 2050. La propuesta ejecutiva de Illa cuenta con una representación paritaria de hombres y mujeres.