Las declaraciones de la presidenta de Junts, Laura Borràs, en qué este martes dio a entender que su partido no descarta votar a favor de una posible moción de censura de PP y Vox contra Pedro Sánchez han servido para que el president, Salvador Illa, hurgara en las contradicciones de este partido sobre el papel que piensa desempeñar en el Congreso de los diputados. Ha sido durante la primera sesión de control a que se ha sometido el president en el Parlament, donde tanto Junts como la CUP le han reprochado sus reiteradas visitas al rey, Felipe VI, y la participación en la celebración del 12 de octubre. Illa ha replicado a ambas fuerzas subrayando su apoyo a las instituciones.
El portavoz de Junts, Albert Batet, ha advertido a Illa que su gobierno es débil y sucursalista, ha criticado que participara en los actos de la Hispanidad con el monarca y le ha reprochado que en 41 votaciones del debate de política general votó diferentes resoluciones con PP y Vox, "la mayoría del 155".
Esto ha dado pie a que el presidente le recordara las declaraciones de Borràs a Tele5, a pesa de que horas más tarde fueron desmentidas por el secretario general del partido, Jordi Turull, que tildó de "fantasía" un posible apoyo de sus diputados a una moción de censura de Núñez Feijóo. "Yo estoy a favor de las instituciones, tendré siempre un comportamiento de defender y prestigiar las instituciones. Todas. Yo sé dónde estoy, me gustaría que también ustedes supieran dónde están y contribuyeran a que el país vaya adelante", ha replicado Illa además de tildar de "temerarios" los reproches de Batet sobre el voto con PP y Vox después de las posibilidades de acción en Madrid que había apuntado Junts el día anterior.
Batet ha aconsejado al president que no haga de jefe de la oposición. Le ha advertido que "la anomalía es que se dedique a pasear con el Rey" y que desde que es president se ha visto más con el monarca que con ningún partido de la cámara. "Olvida los problemas reales. Menos helicóptero y más Rodalies", le ha reclamado.
También la CUP ha hurgado en las visitas de Illa al Rey y la diputada Laia Estrada le ha preguntado si representando un partido socialista y obrero defiende a la monarquía. "Yo que soy el primer secretario de un partido socialista y obrero, respeto a las instituciones", ha respondido el president.
La cupaire ha reprochado a Illa los esfuerzos por mostrar "buena sintonía con el Rey de España" aunque el discurso del 3-O "fue el aval para la persecución del independentismo" y aunque el 54% de la población está en contra de la monarquía. "Tenemos claro que el objetivo es mostrar que Catalunya ha vuelto a la normalidad, pero la normalidad institucional es una auténtica farsa", ha añadido Estrada, que ha señalado que la persecución al independentismo continúa.
En su respuesta, Illa ha insistido en que defenderá las instituciones y se comportará con normalidad institucional y ha dejado claro su voluntad de que se dé cumplimiento a la ley de amnistía.
Multiplicar el ATC por cuatro
Por su parte, el presidente del grupo de ERC, Josep Maria Jové, ha insistido al president sobre la necesidad de que esta legislatura sirva para conseguir avances en soberanía fiscal e Illa ha asegurado que la consellera de Economía, Alícia Romero, ha comenzado ya a trabajar en esta cuestión.
Sin embargo, ERC ha reclamado a Illa concreciones reales sobre la materialización del acuerdo sobre financiación singular y le ha recordado que el compromiso que la Agència Tributària de Catalunya (ATC) recaude en 2026 el IRPF de los catalanes, lo cual obligará a redimensionar ese ente que pasará de recaudar el 18% de los impuestos a asumir el 64%.
En el turno de respuesta, Illa ha garantizado que "se tomarán las medidas necesarias para redimensionar la ATC, que debe multiplicarse por cuatro".
Tanto ERC como Illa han presionado a Junts para que apoye esta propuesta de financiación cuando llegue al Congreso de los diputados.