Después de la emisión del documental Las cloacas de Interior, hay un sentimiento generalizado: el de impunidad. Si en las horas previas a su retransmisión se había colado el hashtag #ProuPuigdemont entre el trending topic español, pronto ha sido desbancado por #CloacasInteriorTV3, que se ha convertido en el tema más comentado en el Estado y también en todo el mundo. No era para menos.
Muchos usuarios han utilizado las redes para expresar este sentimiento de impunidad. También lo han hecho los representantes políticos, empezando por el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, que ha sido uno de los más claros. "Abandonad toda esperanza de regeneración", ha escrito Puigdemont. "Solo los fanáticos defenderán que esto es estado de derecho y una democracia sana".
Además del president Puigdemont, otros miembros de su gabinete también se han referido a ello, como el conseller de Justicia, Carles Mundó, que ha lamentado que una "policía política" persiga a "adversarios" pero que nadie dimita. En términos muy parecidos se ha expresado la consellera de Trabajo, Dolors Bassa, que lo ha calificado de "vergüenza" y ha interpelado directamente a Enric Millo, delegado del Gobierno en Catalunya.
También lo han seguido muy de cerca los integrantes de la comisión de investigación de la operación Catalunya en el Parlament, que conocían como pocos de qué se estaba hablando en el documental. La presidenta de esta comisión, Alba Vergés (Junts pel Sí), ha aplaudido el trabajo de los periodistas de Público que lo han hecho posible y ha criticado que la conversación entre Jorge Fernández Díaz y Daniel de Alfonso "es un insulto a la democracia y una vergüenza para el estado de derecho".
Lluís Guinó, también miembro de la comisión de investigación y ahora presidente del grupo parlamentario de Junts pel Sí, ha denunciado lo que considera una "operación planificada" y una "delincuencia institucionalizada". El diputado también se ha preguntado a qué están dispuestos y hasta dónde están dispuestos a llegar, si han hecho todo eso. La respuesta que ha encontrado es que no tienen límites.
En la misma línea, el diputado Albano-Dante Fachin, de Catalunya Sí que es Pot, que en las horas previas había animado a seguir la retransmisión, ha evidenciado que "tenemos un enorme problema de garantías democráticas" (que no son las del referéndum). De la misma forma, el también secretario general de Podem ha denunciado que estas cloacas han perseguido tanto al independentismo como a su partido: "Persiguen a cualquiera que los desafíe".
Otra diputada que lo ha seguido de cerca ha sido Mireia Boya, de la CUP, que ha querido recordar la relación entre la operación Catalunya y el GAL: "Algunos de los comisarios ya estaban". También ha lamentado que una orden del Consejo de Estado español ha excusado a políticos y policías españoles (excepto el excomisario Marcelino Martín Blas) de venir a la comisión de investigación del Parlament. Según Boya, las cloacas actúan contra todo aquello que "va contra la hegemonía estatal"
El diputado de ERC en el Congreso de Diputados, Gabriel Rufián, ha evidenciado durante la emisión del documental que "nos quedamos cortos". Rufián ha utilizado una expresión que ya ha utilizado en otras ocaciones para describir la operación Catalunya: "Es un GAL que no mataba pero sí difamaba".
El exalcalde de Barcelona y uno de los protagonistas del documental, Xavier Trias, ha esperado al final de la emisión para decir la suya. El hoy concejal del PDeCat ha lamentado también la impunidad: "Ya lo habéis visto. 'Las cloacas de Interior' nos explica un atentado contra la democracia. Lo más grave es que no les ha pasado nada a sus responsables".
Al diputado de Junts pel Sí y cantautor Lluís Llach le ha bastado con tuitear la frase con la que acaba el documental Las cloacas de Interior: "El sistema es tan corrupto que expulsa a los decentes".
No se han encontrado las mismas reacciones entre representantes del PP o Ciudadanos. Por su part, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado que estaba viendo la película 'Goldfinger' en ese momento.