La Familia Real española se ha establecido en Catalunya este martes y miércoles, coincidiendo con la entrega de los premios Princesa de Girona y los actos que los engloban. Felipe y Leonor ya estuvieron la semana pasada, concretamente en la Academia Militar de Talarn, en Lleida, y en esta ocasión han vuelto acompañados también de Letizia y la infanta Sofía. Su presencia, sin embargo, no ha pasado inadvertida por el independentismo que se ha manifestado en Lloret contra la presencia de los Borbones. Representantes de las entidades y partidos independentistas han asistido a esta manifestación bajo el lema "Fora la monarquia i visca la terra" para demostrar a la Familia Real que aunque en los últimos años haya hecho más acto de presencia al país, para el independentismo no son bienvenidos.

Lluís Llach, presidente de la Assemblea, Dolors Bassa y Teresa Jordà de Esquerra, Dani Cornellà de la CUP, o Salvador Vergés y Francesc de Dalmases de Junts, entre otros, son algunas de las personas que han participado de la manifestación, convocada por la Coordinadora Antimonàrquica de Girona, que ha recorrido las calles de Lloret en esta calurosa tarde de julio, una hora antes que empezara el acto, donde Leonor acostumbra a demostrar con unas pocas frases que domina el catalán. Los manifestantes han lucido esteladas y han ido haciendo proclamas a favor de la independencia de Catalunya. Según los Mossos, han participado unas 200 personas, cifra que aumenta hasta las 400 según los organizadores.

Trabas para hacer la manifestación

En las últimas horas, desde la Coordinadora Antimonàrquica han denunciado un "sabotaje a dos bandas" contra la manifestación. Si inicialmente el departament de Interior había aceptado que esta tuviera lugar a unos 100 metros de donde se celebra la entrega de premios, según explican desde la entidad, el pacto se ha roto y la conselleria ha propuesto enviar la concentración 250 metros más lejos, que según los organizadores se trata de una distancia de seguridad exagerada. También han señalado a la policía local de Lloret para no dejarles montar una tarima para pronunciar los discursos, explican, por motivos de seguridad y para dejar pasar los camiones del parque de bomberos que hay en la zona: "Si nosotros, en vez de ser los antimonárquicos, fuéramos los fans de la monarquía, no solo podríamos montarla, sino que nos dejarían hacer el acto en sus morros", denuncian. Por este motivo, los discursos de las entidades se han acabado pronunciando sobre un escenario improvisado.

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