La aprobación definitiva de la ley de amnistía ha servido al independentismo para exhibir unidad y recoser las heridas de los últimos meses. Los discursos de Míriam Nogueras y Gabriel Rufián y los abrazos efusivos en el patio del Congreso ilustran un clima de euforia compartida (y hasta ahora contenida) después de haber conseguido sellar la norma que tiene que reparar la represión del Procés. La votación ha dado paso a los saludos cómplices, las felicitaciones recíprocas y las miradas entrecruzadas. Dentro y a fuera del hemiciclo. Dentro, entre los diputados en los escaños y los invitados en las tribunas. Fuera, entre juntaires y republicanos, rodeados por una marea de cámaras. El abrazo sentido entre Teresa Jordà y Míriam Nogueras ha sido el preludio de la celebración conjunta y unánime.

 

Más tarde, también ha habido saludo entre Jordi Turull, secretario general de Junts, y Oriol Junqueras, presidente de ERC. Después de abrazarse, los dos han bromeado delante de los periodistas. “Hemos estado juntos en muchos sitios”, recordaba Junqueras. “Desayunando, cenando y durmiendo”, puntualizaba Turull. “Durante unos cuantos años”, añadía Junqueras. Y los dos matizaban: “Bueno, durmiendo no”. Junqueras y Turull estuvieron juntos en la prisión, primero en Soto del Real y después en Lledoners, durante casi cuatro años. Clima de entendimiento total entre quienes fueron vicepresidente del Govern y conseller de la Presidencia durante el referéndum del 1 de octubre.

“No querría retirarme sin que constara en el Diario de Sesiones nuestro más profundo agradecimiento”

La emoción también ha protagonizado el debate parlamentario. En nombre de los partidos independentistas, la primera en intervenir ha sido Míriam Nogueras, portavoz de Junts en el Congreso. Visiblemente emocionada, y con el discurso acabado, ha pedido unos segundos añadidos: “No querría retirarme sin que constara en el Diario de Sesiones nuestro más profundo agradecimiento”. De entrada, ha agradecido las contribuciones en la negociación y redacción de la ley que han hecho el abogado Gonzalo Boye, el exdiputado Josep Pagès y el diputado Josep Maria Cervera. Y también ha querido reconocer el compromiso del “conseller Jordi Turull, la presidenta Carme Forcadell, el vicepresident Oriol Junqueras y la consellera Dolors Bassa”, los cuatro condenados por el Tribunal Supremo, indultados en junio del 2021 por el Gobierno y presentes hoy en la tribuna del Congreso para seguir el debate en directo.

“Muchas gracias a Carles Puigdemont por liderar aquel gobierno tan valiente”

Poco después, ha sido el turno de Gabriel Rufián. Después de celebrar que la amnistía es “la primera derrota del régimen del 78”, el portavoz de ERC en el Congreso ha abierto su intervención con el capítulo de agradecimientos. El republicano ha citado a Joan Tardà por haber mencionado en el Congreso que habría que aprobar una ley de amnistía, a Carles Puigdemont “por liderar el gobierno valiente” que puso las urnas del 1-O, a Oriol Junqueras “por haber cogido el encargo de la historia”, a Carme Forcadell “por haber leído aquella declaración sabiendo que le costaría la libertad”, a Raül Romeva “por explicarlo a todo el mundo”, a Jordi Sànchez y Jordi Cuixart “por ser los primeros en soportar”, a Jordi Turull y Marta Rovira por “tirar, tirar y tirar” y a Quim Forn y Josep Lluís Trapero “porque aunque fuera solo durante un día, todo un pueblo se sintió muy orgulloso de su policía”.

 

Además, también ha aplaudido a todos aquellos alcaldes y concejales que “han sido perseguidos por permitir a su pueblo votar”. “Gracias también a toda aquella gente que el 1-O defendió las urnas con el cuerpo”, ha añadido.