Salvador Illa ha vuelto a hacer parte de su discurso en castellano durante el segundo debate de investidura este martes, como ya hizo en el primero que se celebró el pasado viernes. Y esto le ha vuelto a comportar las críticas de buena parte del independentismo.

El diputado de JxCat Jaume Alonso Cuevillas, secretario de la Mesa, ha acusado a Illa de "emular la derecha españolista hablando en castellano en el pleno del Parlament". "Cada vez más lejos de los grandes consensos de país. ¿De verdad alguien espera poder pactar nada con los socialistas?", ha preguntado.

El exdiputado de ERC José Rodríguez, exmiembro del PSC, ha recordado que "hace poco más de 10 años el president Montilla salía a defender el Estatuto recortado por el Tribunal Constitucional". "Hace siete años Iceta hablaba de referéndum acordado con el Estado. 10 años después Illa habla de pasar página en castellano", ha añadido constatando la deriva españolista de los socialistas.

También ha denunciado el cambio de lengua de Illa Plataforma per la Llengua. "Mientras Salvador Illa escoge hablar castellano en el Parlament, su partido impide que se pueda hablar catalán en el Congreso o en la Unión Europea. Más que un derecho, Illa ejerce un privilegio impuesto y discriminatorio. Queda claro: los socialistas ya no apuestan por normalizar el catalán", ha lamentado la entidad.

El porrazo de la ley Celáa

Todas estas críticas se producen pocos días después de que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) anulara dos proyectos lingüísticos escolares porque sólo tenían como lengua vehicular el catalán. Así pues, el tribunal consideró que incumplían la reciente legislación educativa aprobada en el Congreso de los Diputados, popularmente conocida como ley Celáa, que contempla que el 25% del programa se haga en español.

Precisamente esta sentencia ha sido utilizada hoy por JxCat para recordar a los republicanos que ya les advirtieron que la ley Celáa no blindaba la inmersión lingüística. Precisamente ayer ya lo denunció el president en el exilio, Carles Puigdemont, en un tuit. "Me duele mucho que no se hubieran atendido las advertencias. El pactismo mágico tiene estas cosas. Te piensas que tienes un acuerdo que blinda la inmersión lingüística, y descubres que te han vuelto a engañar. Todos hemos caído en este espejismo. Hay que aprender (y tener más humildad)", escribió.