Las sospechas continuadas que el Estado español utilizó el programa israelí de espionaje Pegasus -que permite acceder a teléfonos móviles privados sin casi dejar rastro- contra los líderes independentistas catalanes han quedado lo bastante confirmadas por el semanario norteamericano 'The New Yorker', que este lunes publica una demoledora investigación donde detalla como al menos sesenta políticos catalanes, entre los cuales tres presidentes de la Generalitat, han sido víctimas de este espionaje. Todas las sospechas apuntan a que detrás están los servicios de inteligencia españoles.

El largo reportaje, titulado 'Como las democracias espían a sus ciudadanos' y firmado por Ronan Farrow, empieza explicando como el eurodiputado de ERC Jordi Solé, que sustituyó Oriol Junqueras, sospechó que estaba siendo víctima de espionaje a través del móvil y contactó con el investigador de seguridad Elies Campo, colaborador del Citizen Lab, un grupo de investigación con sede en la Universidad de Toronto que se centra en los abusos de los derechos humanos de alta tecnología. Es esta entidad la que ha podido corroborar que, efectivamente, el móvil de Solé había sido rastreado, así como el de más de sesenta políticos independentistas, entre los cuales el presidente Pere Aragonès.

Según el texto de 'The New Yorker', "más de sesenta teléfonos, propiedad de políticos catalanes, abogados y activistas a espanya y de toda Europa han sido espiados con Pegasus". Entre los espiados habría tres eurodiputados catalanes, y por eso se acuerda de que los políticos catalanes siempre han creído que detrás había funcionarios españoles, Según la revista norteamericana, la investigación del Citizen Lab "sugiere que el Gobierno ha utilizado Pegasus".

El independentismo reacciona

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha sido de los primeros a mostrar su indignación con el caso de espionaje y lo ha hecho a través de un hilo en Twitter. "La operación de espionaje masivo contra el independentismo catalán es una vergüenza injustificable. Un ataque a los derechos fundamentales y a la democracia extremadamente grave. Un ejemplo más de la represión contra un movimiento pacífico y cívico. Llegaremos hasta donde haga falta".

En otro de los tuits del president Aragonès, pide llegar al fondo de la cuestión: "Este software de espionaje sólo puede ser adquirido por los Estados. El Gobierno tiene que dar explicaciones inmediatamente y llegar hasta el final. No valen excusas. Espiar representantes de la ciudadanía, abogados o activistas por los derechos civiles es una línea roja".

El president en el exilio Carles Puigdemont también ha respondido rápidamente al caso de espionaje atribuido a los servicios de inteligencia españoles. Con contundencia, ha denunciado que "Hemos sido espiados de manera masiva e ilegal a través de un programa que sólo pueden tener los Estados. Políticos, abogados y activistas, víctimas de la guerra sucia|bruta del Estado español para luchar contra una idea legítima".

La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha sido fulminante en contra del caso de espionaje a políticos y ciudadanos independentistas con un tuit. "Nos persiguen por tierra, mar y aire: nos pegan cuando votamos, nos asedian judicialmente, nos encarcelan y ahora sabemos que también nos espían. Se ve que algunos fines justifican todos los medios…#CatalanGate".

Ernest Maragall, líder del grupo parlamentario de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, califica al CatalanGate como "el mayor escándalo antidemocrático de Europa".

El president de ERC, Oriol Junqueras, asegura vía Twitter que "el independentismo ha sido víctima del caso de espionaje ilegal mayor del mundo". Y denuncia que "el CatalanGate es un atentado directo contra la democracia, los derechos y libertades fundamentales". Y lo remacha afirmando que "esta causa no quedará impune".

Otra de las personas que ha reaccionado al CatalanGate es el exdiputado de la CUP, David Fernández, quien también se encuentra entre la lista de políticos, activistas y ciudadanos independentistas espiados. Y lo ha hecho mediante una cita del comisario Eugenio Pino del año 2019: "'Hemos realizado operaciones que pondrían los pelos de punta. Por España'. Hoy, tras una larga investigación, Citizen Lab documenta el macroespionaje ilegal masivo contra el independentismo".

El presidente Quim Torra ha tildado de "repugnando" el caso CatalanGate y ha anunciado que, mañana martes 19 de abril, hará una declaración sobre este espionaje. "Es inexcusable que se asuman las más altas responsabilidades políticas y que el gobierno catalán reaccione a tanta inmundicia", ha criticado.