Empate en el primer asalto. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, han vivido este martes su primer cara a cara en las Cortes españolas. El enfrentamiento había generado mucha expectativa. A diferencia de otros líderes de la oposición, el que fue jefe del ejecutivo en Galicia no tiene acta de diputado, y por lo tanto no puede discutir verbalmente con Sánchez desde el Congreso de los Diputados. Para facilitar las cosas, el senador gallego Miguel Tellado abandonó hace unas semanas su asiento para cederlo a Feijóo, y convertir el Senado en el escenario para los debates públicos entre los dos políticos del bipartidismo español.
El espectáculo de hoy se ha visto marcado por los reproches habituales, pero también por el tanteo. Tanto Sánchez como Feijóo han querido compartir su voluntad de llegar a acuerdos y entenderse de cara al futuro. El popular, por ejemplo, se ha estrenado reivindicando la política útil y distanciándose de "la crispación y los insultos" que se vivía durante los debates entre el presidente español y Pablo Casado. "No me reconozco en aquella política ni lo hacen la mayoría de españoles". Por contraste, ha querido mostrarse como una "alternativa", un hombre con quien se puede llegar a acuerdos, recordando que ya le propuso un plan económico basado en la bajada de impuestos (una cuestión en la cual ha vuelto a insistir).
Pero también ha habido tiempo para los ataques. Entre otras cosas, el popular ha acusado a Sánchez de tener la oposición dentro de su propio gobierno, en referencia a los ministros de Unidas Podemos, y también ha lamentado los socios con quién pacta, como Esquerra Republicana y EH Bildu. "Tendría que dejar de estar a la altura de la minoría de los independentistas y ponerse a la altura de las mayorías", ha rematado. No solo eso, sino que también ha dicho que Sánchez "es como un conductor que va en dirección contraria", y que deje de pensar en el llamado 'efecto Feijóo' en el PP para centrarse en "el efecto de la inflación".
"No cumplen la Constitución"
En el turno de Pedro Sánchez, más de lo mismo. Por una parte, le ha ofrecido una bienvenida cordial y ha compartido la voluntad del popular de llegar a acuerdos y trabajar "por una mayor unidad". Y también ha aprovechado para reivindicar el trabajo hecho por el ejecutivo durante este tiempo, para hacer frente a la pandemia y a la guerra en Ucrania. "El gobierno de España siempre trabaja para proteger a las familias y las empresas. Lo hemos hecho con el escudo social, el Ingreso Mínimo Vital y los Fondos Europeos".
Pero también ha habido muchos reproches de Sánchez a Feijóo, acusándolo de ser desleal con la Constitución. "¿Está dispuesto a cumplirla y renovar los órganos constitucionales?", ha preguntado en referencia al Consejo General del Poder Judicial. También ha lamentado que no quiso pactar con él para quitar la palabra 'disminuido', y que "continúa en la línea de Casado de hablar mal de España cuando viaja fuera".