Tiene setenta años y movilidad reducida. La maestra jubilada de Palafrugell acusada de incitar al odio contra un guardia civil ha vuelto este martes a los juzgados, ahora para ser investigada por injurias y amenazas a un agente que participó en las cargas del 1-O. Y todo por un comentario en las redes sociales.
La profesora, Mariona Reig, se ha acogido a su derecho a no declarar, tal como ya hizo en la última visita a los juzgados. Ha dicho que está "tranquila", aunque un proceso como el que está sufriendo sólo busca "que estemos callados". "Pero diré lo que me parezca, me he pasado media vida enseñando conocimientos y valores: ¿creéis que diría una mala palabra?", se ha preguntado.
Un comentario en redes sociales
Se la está investigando por un comentario en las redes sociales contra un guardia civil. Concretamente, la foto del agente se difundió en Facebook, donde se lo identificó como uno de los guardias civiles que habían participado en las cargas policiales del 1-O en Sant Carles de la Ràpita y Roquetes. Al ver la imagen, la maestra escribió que se le tendría que hacer una visita y "devolverle el favor".
El agente denunció la difusión de la foto y de los comentarios. Algo que ha desembocado en una causa en la cual se acusa a la profesora de incitar al odio contra el guardia civil y que se ha mantenido secreta durante más de dos años y que tiene más de mil folios. Aparte de la investigación de la dirección IP o de la titularidad de cuentas en las redes, la causa ha derivado incluso en comisiones rogatorias en el extranjero (entre las cuales, en los Estados Unidos o en Irlanda).
La Fiscalía no ve delito
Este martes, Reig ha tenido que volver a comparecer. Esta vez, investigada por injurias y amenazas contra el agente en el marco de la misma causa. Una causa que se tiene que archivar "de manera inmediata", según la abogada de la profesora, Montse Vinyets, ya que hay un escrito de la Fiscalía que no ve delito de incitación al odio. Pero, a pesar de todo, la jueza mantiene la imputación, incorporando las injurias y amenazas.
"La decisión correcta y jurídicamente aplicable sería un archivo absoluto, porque no hay ningún hecho constitutivo de delito; el comentario de Facebook es totalmente inofensivo", ha añadido Vinyets. Además, la abogada destaca la "pretensión económica por parte del denunciante", que se encuentra de baja y tiene reconocida una invalidez del 50% a raíz de estos hechos. "Alega que ha sufrido numerosos perjuicios morales, físicos y psicológicos; pero nos parece que se rompe cualquier relación entre los hechos que él denuncia y las consecuencias que recogen los informes", ha explicado.
Ante los juzgados de la Bisbal, donde ha ido a declarar de manera telemática, una cincuentena de personas se han reunido para darle apoyo. Entre la gente que ha ido a mostrar su apoyo se encuentra la exconsellera Dolors Bassa, que conoce a Reig de haber trabajado juntas algún tiempo haciendo de maestras. "Es bestial que a una persona mayor y discapacitada, para que haya hecho un escrito al Facebook, se le puedan imputar delitos de odio; no se entiende de ninguna manera", ha dicho la exconsellera.
"Nosotros hemos salido de la prisión con un indulto y es evidente que tenemos mejor calidad de vida, pero también es evidente que la represión no se ha acabado", ha añadido Bassa, que dice que se tiene que seguir trabajando para conseguir la amnistía y el derecho a la autodeterminación.