La ministra de Igualdad y diputada de Podemos, Irene Montero, reconoce que la formación morada desconocía que el PSOE estuviera negociando la huida del rey Juan Carlos I. "No es una decisión que se haya tomado en el Gobierno de coalición" sino que ha sido del "PSOE desde la Moncloa", ha manifestado Montero en una entrevista en la Ser.
Ahora bien, pese a que ha asegurado que lo respeta, ha resaltado que si lo hubieran sabido, habrían mostrado sus discrepancias.
Huida indigna
Además, Montero ha calificado la marcha del rey emérito como una "huida indigna" a la vez que ha asegurado que "la gente no quiere más corrupción", por lo que considera que el antiguo monarca debería "rendir cuentas ante su pueblo".
El Borbón decidió marcharse del país después de que salieran a la luz unos presuntos casos de corrupción. En concreto, el Tribunal Supremo investiga si habría cobrado comisiones para la construcción del AVE de la Meca.
"En España hay una sensación ampliamente mayoritaria de que la justicia no es igual para todos y que la gente con mucho poder consigue cosas que un ciudadano de a pie no podría conseguir", ha destacado Montero, quien ha añadido: "España está cansada de impunidad y corrupción. Lo lógico en el siglo XXI es que cualquiera que haya cometido actos de corrupción, rinda cuentas".
Bajo su punto de vista, la huida del emérito ha dejado a "la monarquía en una situación muy comprometida", así como el hecho que "la propia institución avale la decisión del rey emérito de huir de España la coloca en una situación muy delicada".
En esta línea, la ministra ha opinado que "una institución como la monarquía debería velar por la limpieza de las instituciones, y si el Tribunal Supremo lo está investigando, debería actuarse de forma ejemplar".
Sobre la negociación con Ciudadanos
En otro contexto, Montero también ha tenido palabras hacia los líderes de la formación naranja y ha declarado: "No se entiende que Ciudadanos diga que se reúne con el Gobierno cuando veta a una de las formaciones que forman parte del Gobierno porque así lo han querido los españoles".
También, se ha dirigido a sus socios del Ejecutivo y ha resaltado que un "gobierno progresista tiene que pensar primero qué quiere hacer y luego con qué socios puede construir esas propuestas políticas". Por ello, ha defendido que "los acuerdos no se labran en abstracto. Y una formación como Ciudadanos, que gobierna con Vox en varias comunidades autónomas, no puede poner en práctica las políticas de este Gobierno".