La segunda noche de disturbios delante de la sede de Ferraz del PSOE ha dejado más imágenes de violencia, así como cánticos de derecha y extrema derecha. En este ambiente de violencia y crispación por las calles de Madrid atizado por formaciones como el PP y Vox contra la amnistía, Carles Puigdemont ha ironizado con la respuesta tibia que han tenido ciertas autoridades hasta ahora. Comparando la respuesta a estas manifestaciones con las independentistas, se ha preguntado: "¿Después de lo que está pasando en Madrid, a qué hora sale el rey a dar el mensaje ordenando ir "a por ellos"? ¿O es que está "con ellos"?".

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A través de las redes sociales, Puigdemont ha lanzado esta pregunta retórica, haciendo una referencia directa al discurso de Felipe VI el 3 de octubre de 2017 y a los cánticos de los guardias civiles y otros cuerpos de seguridad del Estado destinados a Catalunya para detener el referéndum del 1-O.

Segunda noche de disturbios: detenciones y cánticos fascistas

La nueva jornada de protestas delante de la sede del PSOE ha acabado con un balance de seis personas detenidas. Según fuentes del ministerio de Interior, se trata de cinco hombres y una mujer de entre 19 y 44 años, y un menor de edad de 17 años. Aparte, 30 agentes de la Policía Nacional han resultado heridos de diversa consideración. La policía acabó cargando contra los concentrados, los cuales lanzaron objetos y trataron de romper el cordón policial.

Entre banderas franquistas y con el himno del Cara el sol sonando de fondo, la manifestación delante de Ferraz se ha llenado de amenazas, lemas racistas y homófobos y contra la amnistía. Los principales objetivos de la ira de los manifestantes de derecha y extrema derecha eran Pedro Sánchez y Carles Puigdemont, coreando lemas como "España no se vende, España se defiende"; "Puigdemont a prisión" o "Pedro Sánchez, hijo de puta." Sin embargo, los ultras cargan contra higueras que antes defendían: Felipe VI o, como se le ha apodado, Felpudo VI. "Felipe, masón, defiende tú nación". Todos estos rumores han sido acompañados de bengalas y violencia contra el despliegue policial delante de la sede socialista y, finalmente, se han desatado las cargas policiales.

A primera línea y separados por vallas de la Policía Nacional, se han agrupado afiliados a la formación ultra España 2000, los cuales se han llegado a enfrentar con otros manifestantes que les reprochaban sus proclamas nazis. Además, la líder del grupo neonazi de Bastión Frontal, Isabel Medina Peralta, ha subido con otro chico al techo de un quiosco de tabaco haciendo el saludo nazi y mostrando una bandera con la cruz de Borgoña.