No se repetirá la imagen de 2021 en el Palacio de la Moncloa. Isabel Díaz Ayuso acentúa su guerra abierta con Pedro Sánchez, se desmarca de sus compañeros de filas del PP y no asistirá a la reunión a la que la ha convocado el presidente español, que en septiembre empezó una ronda de contactos con los líderes autonómicos. La Moncloa enmarca estas reuniones bilaterales en la voluntad de “reforzar y fortalecer” la colaboración con los gobiernos autonómicos, pero a nadie se le escapa que la financiación autonómica ha emergido como uno de los grandes temas de la política española actual. La líder madrileña ha decidido rechazar la reunión con Pedro Sánchez por dos motivos: el pacto entre el PSC y ERC para una financiación singular para Catalunya y las “gravísimas acusaciones” que le lanzó el presidente español el jueves pasado por el caso de fraude fiscal de su pareja. Hace semanas, Ayuso dejó en el aire su reunión con Sánchez y expresó que decidiría si asistía cuando viera el orden del día: “Que vea yo de qué va y ya veremos. No pienso hablar de lo que es de todos”, afirmó. Y finalmente apuesta por “no cancelar su agenda” prevista para este viernes 25 de octubre, cuando la había convocado la Moncloa, y acudir al acto que tenía previsto en Porriño (Galicia).
En un comunicado difundido esta mañana, Isabel Díaz Ayuso argumenta los dos motivos que le llevan a plantar al presidente del Gobierno. Por un lado, lamenta que la ronda de reuniones con los presidentes autonómicos se celebre después de la negociación de la “ruptura de la Hacienda común de todos los españoles con los socios independentistas”. La presidenta madrileña considera que el acuerdo entre el PSC y ERC será “letal para el Estado de derecho, la unidad de España y la solidaridad entre regiones” y arguye que esta decisión “no puede darse por válida” porque “nunca se ha consultado ni con los presidentes autonómicos ni con el pueblo español en programa electoral alguno”. “Desde las pasadas elecciones generales, se están tomando una serie de decisiones destructivas cuyos efectos negativos tardarán mucho en revertirse”, concluye.
Por otro lado, Ayuso señala que, menos de 24 horas antes de la llamada de la Moncloa, el presidente del Gobierno le “difamó” en viaje oficial a Bruselas con unas “gravísimas acusaciones” y sostiene que los ministros “han recibido la orden de repetirlas durante las últimas horas, en una campaña inaceptable e impropia de un Gobierno contra una administración inferior”. “El deterioro institucional al que se está sometiendo a España no puede pasarse por alto”, concluye. Pedro Sánchez afirmó que la pareja de Ayuso, Alberto González Amador, es un “delincuente confeso que ha defraudado a Hacienda y que se ha lucrado con las mascarillas durante la pandemia” y aseguró que la presidenta “puede haberse beneficiado de esta situación indirectamente”.
Feijóo, a principios de septiembre: “Si un presidente autonómico no acude a la Moncloa, creo que comete un error”
Con esta decisión, Isabel Díaz Ayuso se distancia de la postura del PP y de lo que han hecho el resto de barones populares. Sin ir más lejos, en una entrevista en El Mundo el 9 de septiembre, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, reivindicó que él, como presidente de la Xunta, asistió a “todas las reuniones” con José Luis Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez. “Un presidente de una comunidad no elige al presidente del Gobierno que le toca. Por lo tanto, no veo ningún riesgo al respecto. Si un presidente autonómico no va al Palacio de la Moncloa, creo que comete un error”, afirmó. Feijóo se mostró partidario de que Ayuso asistiera para “tratar los asuntos de Madrid”, como las Cercanías o la inmigración. “Yo creo que la presidenta Ayuso sabe muy bien que su responsabilidad es defender los intereses de los madrileños y practicar una política de Estado, y eso es lo que ha hecho siempre”, añadió.
Tras conocerse la decisión de Ayuso, fuentes de la dirección del PP señalan que Alberto Núñez Feijóo habló con ella ayer por teléfono y afirman que el líder popular “mantiene todo lo que dijo”, pero es “comprensivo” con las “motivaciones y circunstancias” de la presidenta madrileña. Lamentan que “todo se ha recrudecido” desde la imputación al fiscal general del Estado y denuncian que Sánchez no pida la dimisión de Álvaro García Ortiz por “perseguirla” y, en cambio, catalogue de “corrupta” a Ayuso, que “no está imputada por nada”.
La entrevista a Feijóo llegaba tres días después de la cumbre que había convocado él mismo con todos los presidentes autonómicos del PP para exhibir una imagen de unidad. Los barones populares renunciaron “expresamente” a “caer en una bilateralidad tramposa” con Pedro Sánchez. La conclusión fue que “lo que es de todos se dialogue y se acuerde entre todos” y no participar de las “subastas” del PSOE. Los dos primeros líderes del PP en asistir a la Moncloa fueron Alfonso Rueda (de Galicia) y Juan Manuel Moreno Bonilla (de Andalucía). Ambos reclamaron a Sánchez que retire la propuesta de financiación singular para Catalunya y le exigieron que convoque una Conferencia de Presidentes para debatir la financiación autonómica. Posteriormente, los presidentes de Murcia y del País Valencià, Fernando López Miras y Carlos Mazón, siguieron el mismo camino, igual que el presidente de Aragón, Jorge Azcón, que denunció los “privilegios” de los catalanes.