La izquierda independentista ha conseguido movilizar un buen puñado de manifestantes (unos 6.000, según la CUP) por las calles de Barcelona. En un acto posterior al acto político organizado por la ANC, Òmnium, Consell de la República, CIEMEN, l'AMI y la Intersindical, la izquierda independentista ha intentado aprovechar, como cada año, la Diada para vincular la lucha independentista con la lucha anticapitalista. Sin embargo, este año, con un plus añadido: la entrada de un partido el cual consideran de extrema derecha como es Aliança Catalana en el Parlament de Catalunya. De hecho, por eso, se han movilizado con la oleada reivindicativa de "el independentismo popular antifascista" y bajo el lema 'Hacerlo posible'.
La CUP, Endavant, SEPC, el sindicato COS, el Sindicato de Estudiantes de los Països Catalans o la organización juvenil Arran han empezado la manifestación en la plaza Urquinaona, en un ambiente tranquilo y, al mismo tiempo, reivindicativo. La marcha la encabezaba una furgoneta, con varios manifestantes a encima de ella que llamaban, a través de un megáfono, consignas anticapitalistas. ¡Gritos como "Anticapitalistas! "Ni España ni Francia, Països Catalans," "no podemos ser una región de España, no queremos ser un país ocupado, queremos la independencia, queremos Països Catalans" o "Fuera de las fuerzas de ocupación" han acompañado a los centenares de manifestantes que han acabado al Mercado del Born.
Esteladas y pancartas reivindicativas
La movilización ha ido acompañada de esteladas, pancartas contra Illa y Sánchez y reivindicaciones de la izquierda alternativa, entre las cuales banderas a favor de Palestina. De hecho, en este sentido, la marcha ha ido vinculada a reivindicaciones propias de los partidos de izquierda, como las acusaciones en Israel de Estado terrorista o consignas antimilitaristas. También lo han acompañado banderas de territorios como Asturias o Galicia. Con todo, también se han escuchado gritos reivindicativos a favor de la lucha feminista, a favor de la vivienda y de la lucha sindical.
De hecho, antes del inicio de la manifestación, la CUP ha admitido que el independentismo pasa por un "momento adverso" y ha pedido tener una "mirada larga" más allá de la "fotografía" de las cifras de las manifestaciones de hoy para rehacer el movimiento soberanista. La diputada en el Parlamento Laia Estrada ha recordado que con la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat los cupaires ya certificaron "la muerte del procés", pero ha asegurado que ahora "se inicia una nueva etapa". En este sentido, ha asegurado que la CUP se compromete a trabajar por articular "una nueva mayoría popular" que reanude la "confrontación" con el Estado y que "impida que la clase dirigente vuelva a retroceder como ha pasado en este ciclo".