El diputado de Junts y miembro de la ejecutiva del partido, Joan Canadell, ha cargado contra ERC y lo ha acusado de demostrar "definitivamente que abandona la vía de la confrontación y deja en manos del Estado (haya PSOE/Podem o PP/Vox) la resolución del conflicto". A través de un hilo en Twitter, Canadell ha valorado que la reforma del delito de sedición que se ha presentado este viernes en el Congreso de los Diputados "hace mucho más difícil el control del territorio", que ha ejemplarizado con las acciones a proponer el Tsunami Democràtic, e "incluso las acciones de los CDR". Canadell también ha recordado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que fue investido para culminar la independencia, y pactó con la CUP y Junts para defender la mesa de diálogo durante 2 años con "el objetivo, amnistía y autodeterminación".
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Moción de confianza o elecciones
Joan Canadell ha lamentado que durante los 18 meses que lleva Aragonès en el Govern ha conseguido una reforma del delito de sedición, pero en ningún caso la amnistía ni la autodeterminación". Además, el diputado de Junts ha acusado al presidente de engañar a la CUP, a Junts y la sociedad civil. "Hace falta moción de confianza o elecciones, pero el PSC/PSOE los cubrirá las espaldas para no hacer elecciones", ha remachado. Sobre la salida de Junts del Govern, Canadell ha asegurado que ya hizo bien de "no ser cómplice de este engaño y ahora hace falta que lidere la alternativa". Para Canadell la única opción para llegar a la independencia es reactivar la DUI, tal como se aprobó a la ponencia política en julio. "Solo tendremos 68 diputados dispuestos si ERC pierde apoyo de sus votantes a las próximas elecciones y la alternativa Junts/CUP sale reforzada", Canadell lamenta que en caso de no ser así, "entenderemos que la sociedad civil da la razón a ERC y se ha acabado el proceso de independencia durante años...". ¿Por último, el diputado ha afirmado que es optimista, y se cuestiona, los silbidos del Camp Nou son el inicio?
Las reacciones de JxCat
Carles Puigdemont ha considerado que el anuncio de reforma de la sedición simplemente "cambia el nombre" del delito, pero no lo deroga. El presidente en el exilio invita a "leer muy bien la letra pequeña y la grande", ya que considera que Sánchez "es un maestro en el arte de la engañifa". Al mismo tiempo, el eurodiputado de JuntsXCat opina que si se continúa condenado la organización de un referéndum por la independencia, da igual si es 15 años de prisión o son 5: están criminalizando un derecho". Según Puigdemont, la "ganancia individual" que supondría la rebaja de penas que comportaría la transformación de la sedición en un delito de desórdenes públicos agravados "no desemboca en una ganancia política. No se desjudicializaría nada".
Por otra parte, la presidenta de JxCat, Laura Borràs, también a través de Twitter, ha alertado que "ve que el remedio de los desórdenes públicos agravados no sea peor que la enfermedad de la sedición". Y ha afirmado que con este anuncio "Sánchez hace de Sánchez", y, añade que "veremos si querrá decir: el 1 de octubre no fue sedición, sino desórdenes públicos agravados". La líder de Junts ha remachado que si hubo desórdenes públicos agravados "fueron protagonizados por los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado".
Por último, el secretario general de Junts, Jordi Turull, en una entrevista a RAC 1 ha dicho que la reforma del delito de sedición "parece un traje hecho a medida" para poder decir que el 1-O y los hechos del 2017 fueron un delito. "Queremos saber si asumen que lo que pasó el 20-S pasaría de una pena de 9 años a 5 años, porque entonces en todo caso hablaríamos de rebajar la gravedad de la judicialización y no de desjudicialización".