El exdiputado de Esquerra Republicana en el Congreso, Joan Tardà, ha levantado la voz a través de la red X (antes, Twitter) por el caso de los carteles de la campaña "Fora l'Alzheimer de Barcelona" contra Ernest Maragall y que este lunes el Ara revela que estos salieron de las filas del partido. En el mensaje, Tardà explica que como miembro del Consell Nacional de la formación republicana garantiza a sus compañeros que lo escogieron que "en la próxima convocatoria" de este órgano "se exigirá a la dirección la verdad y la depuración de responsabilidades a los responsables de este atentado" contra el partido. En esta línea, el exparlamentario se muestra contundente y manifiesta que los militantes no merecen "pasar esta vergüenza".

 

Esta publicación de Tardà se suma a muchas otras del partido que también condenan estos hechos. Desde la dirección de Esquerra Republicana, la portavoz del partido, Raquel Sans, ha apuntado que el militante que ideó los carteles contra los hermanos Maragall actuó solo y que no recibió órdenes de los mandos de la formación. Al mismo tiempo, Sans ha apuntado que el órgano directivo tuvo conocimiento que estaba detrás de la maniobra un militante de ERC de Anoia cuando él mismo lo habría confesado durante la investigación judicial que se inició fruto de la denuncia que el que fue candidato de ERC en Barcelona, Ernest Maragall, presentó. Además, ha explicado que el militante tenía un "vínculo laboral" con el partido y que se le apartó de sus "funciones" con posterioridad a la confesión, aunque no ha aclarado qué papel tenía este en el seno de la formación. De hecho, Raquel Sans ha sido preguntada por el papel que habrían tenido algunos nombres destacados como Sergi Sabrià, Marc Colomer (exsecretario de comunicación de ERC) o Tolo Moya (director de comunicación del partido), y la portavoz se ha limitado a defender que "se aclararán todas las responsabilidades" y será después cuando se adopten decisiones al respecto.

Junqueras niega conocer los hechos

A lo largo de la rueda de prensa, Raquel Sans ha llegado a apuntar que tanto Oriol Junqueras como Marta Rovira eran conocedores de estos hechos. El expresidente de ERC lo ha querido desmentir a través de las redes sociales con este mensaje: "Quiero dejar bien claro que nunca he tenido conocimiento de los hechos que se han hecho públicos hoy. Como presidente de ERC hasta el pasado 10 de junio, no he tenido ninguna información sobre la existencia de estas prácticas". En la publicación, Junqueras se ha mostrado "sorprendido y decepcionado" y ha anunciado que pedirá a los "órganos que velan por el buen funcionamiento del partido que llegue hasta el fondo de la cuestión y se tomen todas las medidas oportunas para aclarar unos hechos que, en caso de que se confirmen, serían profundamente lamentables y condenables".

Alamany y Baró piden asunción de responsabilidades

A su vez, las líderes del partido en Barcelona, Elisenda Alamany y Eva Baró, se han mostrado contundentes contra el caso. Alamany, que asumió el liderazgo del grupo municipal en el Ayuntamiento con la marcha de Ernest Maragall, ha bautizado como "inaceptable" todo lo que se ha conocido y considera que un partido como el suyo no se lo puede permitir. Por todo ello, sostiene que los que participaron de la campaña de las últimas elecciones barcelonesas se merecen "explicaciones" y confía en que ERC "irá hasta el final en la asunción de responsabilidades". En términos similares se ha expresado Eva Baró, la presidenta del partido de la Federació de Barcelona: "Profunda tristeza y una nueva decepción. La militancia de ERC Barcelona merece explicaciones. Hace falta una depuración de responsabilidades a la altura del agravio y de la indignidad que todo representa".