El exletrado del Tribunal Constitucional Joaquín Urías ha expuesto dos vías para que el Tribunal Constitucional pueda dar luz verde a una posible ley de amnistía. La primera, que rechaza al PSOE y reclama el independentismo, es la de argumentar en los motivos de la ley que durante toda la lucha contra los líderes del Procés se cometieron "excesos". "Eso implicaría deslegitimar los tribunales españoles, hecho que el PSOE ve con malos ojos", dice el jurista. La segunda opción que ha puesto sobre la mesa Urías es la de argumentar una amnistía a través de un retorno a la "convivencia", aunque eso, según Urías, implicaría que el independentismo renunciara a la vía unilateral. "Si se aprueba una amnistía diciendo que servirá para la concordia y para superar la situación y el independentismo dice que no se moverá, la justificación cae por su propio peso", argumenta Urías en una entrevista en el programa Aquí Catalunya de la Cadena Ser.

Las dos vías para justificar la amnistía en el TC

Urías asistirá como oyente de la presentación de la propuesta jurídica de Sumar sobre la amnistía este martes. De hecho, explica que ha sido consultado de "forma técnica" por parte de dirigentes de la formación de Yolanda Díaz, aunque reconoce que no ha participado ni en el escrito final ni ha visto su redacción definitiva. Con respecto a la amnistía, Urías subraya que el problema constitucional es "como justificar una diferencia de tratamiento de igualdad". "El porqué a unas personas se las condena y a otras no", explica Urías, quien considera que el actual debate no está entre el sí o no a la amnistía, sino en el motivo con el cual se expone.

"El relato que tienen los partidos independentistas es que el delito de sedición nunca se había aplicado, que también se les ha aplicado el del delito de malversación ilegalmente y creen que no se les ha juzgado bien. El relato de los socialistas es que respetan los tribunales, pero que se tiene que pasar página", afirma el jurista exponiendo las dos vías de justificación en el TC.

Los problemas con la amnistía

Con todo, Urías también avisa de que "se tiene que ir muy con cuidado" de cuál es el alcance de una posible amnistía y expone que los hechos condenados con los delitos de sedición y malversación no "plantean ningún problema" a la hora de ser amnistiados. En cambio, sí que ve problemas en los delitos donde hay violencia, como las condenas de desórdenes públicos. Y es que el problema de raíz viene en la justificación, porque si se amnistían hechos como lanzamiento de piedras o ladrillos podría implicar que con el solo hecho de decir ante el juez que el manifestante es independentista podría quedar amnistiado, según Urías.

De hecho, también expone este problema con la amnistía para los policías que golpearon a los votantes independentistas durante el referéndum del Primero de Octubre. "Si ha habido un maltrato policial, es muy difícil de explicar y marcaría un precedente muy complicado para el futuro de cara al perdón al exceso de violencia", expone Urías.

Urías alerta también del hecho de que el juez instructor de causas como la del presidente Puigdemont quede a la espera de resolver durante unos años. El riesgo de presentar prejudiciales a Europa o al TC existe. Retrasaría toda su aplicación", explica el exletrado. Por eso, aconseja a Puigdemont que durante este periodo no pise territorio español. Además, también avisa de que la amnistía podría perjudicar el independentismo en sus casos en los tribunales europeos. "No tiene por qué quitarle la razón, pero puede ser que no haya ni pronunciamiento porque ya se haya reparado la vulneración de derechos", explica el jurista.

El referéndum en el Constitucional

Sobre la propuesta de la ANC de levantar la DUI el mismo día de la aplicación de la amnistía, Urías recuerda que las personas encausadas por el Procés "no fueron condenadas por declararla". Con respecto a la cabida de un referéndum dentro de la Constitución, subraya que "no hay obstáculos" en el seno de la Carta Magna. "Hay obstáculos en la interpretación del Constitucional. El TC dijo que el único referéndum posible sería sobre la reforma de la Constitucional", explica el exletrado del TC. Sin embargo, considera que esta interpretación podría cambiar con la actual composición progresista del tribunal y argumenta que también dependería de la pregunta. "Si es la independencia, sí o no, creo que sería inconstitucional", subraya.