Jordi Cuixart se va a vivir "temporalmente" a Suiza. Así lo ha anunciado él mismo en un acto de Òmnium Cultural en Sant Just Desvern (Baix Llobregat) celebrado este lunes, en el cual ha precisado que lo hace para representar la estrategia internacional de la entidad en Europa como presidente de Òmnium Civil Rights Europe (OCRE) y seguir denunciando la vulneración de derechos fundamentales por parte del estado español, coincidiendo con la causa abierta en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH). De hecho, el mismo Cuixart ya denunció el CatalanGate ante la ONU en Ginebra (Suiza) el pasado 30 de junio. La marcha del expresidente de Òmnium hacia tierras helvéticas también se explica porque su empresa de embalaje está creando un centro de innovación en el país junto con una universidad suiza. El nombre de la empresa es Aranow y tiene la sede en Polinyà (Vallès Occidental).
"Queremos utilizar todos los frentes para conseguir nuestro objetivo, que es la consecución de la República Catalana porque estamos convencidos de que lo volveremos a hacer y lo haremos juntos", ha señalado Cuixart durante el acto, donde ha intervenido de manera telemática. Así pues, ha precisado que las Naciones Unidas serán uno de los frentes principales donde Òmnium Cultural pondrá el foco para denunciar la represión y la vulneración de derechos humanos por parte del Estado. Lo hará mediante OCRE, entidad que lidera desde el mes de febrero (cuándo pasó el relevo a Xavier Antich). Pero la cosa no acaba aquí: el expresidente de Òmnium tiene pendiente resolver el recurso ante el TEDH contra el estado español por su encarcelamiento político durante casi cuatro años.
La denuncia del CatalanGate
El acto de este lunes forma parte de la campaña de denuncia del CatalanGate que la entidad organiza por todo el territorio. Aparte de Cuixart, también han participado el mismo Antich y la abogada penalista Anaïs Franquesa. Antich ha recordado que existe una causa general con más de 4.200 causas represivas contra el independentismo catalán, a la vez que ha reivindicado que Òmnium quiere "convertir la represión en lucha". Sobre el espionaje con Pegasus (que afecta como mínimo a 65 independentistas), el presidente de la entidad ha asegurado que demuestra la persecución política "contra todo un proyecto político". "Es un escándalo monumental desde la perspectiva internacional", ha dicho Antich. Finalmente, Franquesa ha dejado claro que "los estados no tienen un poder ilimitado para hacer lo que quieran, los límites los marca siempre el respeto a los derechos fundamentales".
El anuncio de Cuixart se produce, justamente, una semana después de que Anna Gabriel se presentara al Tribunal Supremo. Recordemos que la exdiputada de la CUP hace cuatro años que vive exiliada en Suiza, donde ahora se marcha el expresidente de Òmnium. Pero en el caso de Cuixart no hablamos de ningún tipo de exilio: tiene libertad absoluta de movimientos y, por lo tanto, podrá volver a Catalunya siempre que quiera. Gabriel compareció ante la justicia de manera voluntaria con el fin de intentar regularizar su situación procesal, de manera que quedó en libertad provisional y volvió al país helvético.