El secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Sànchez, ha defendido este lunes un pacto entre la presidenta del Parlament, Laura Borràs, y el exconseller Jordi Turull para que presenten una candidatura única a la dirección del partido y ha reclamado "lealtad de grupo". Mañana martes a las 16:00 horas finaliza el plazo de presentación de precandidaturas por renovar la dirección en el congreso del 4 de junio, mientras sigue la incógnita sobre si Borràs y Turull serán capaces de presentar una lista conjunta o si se postularán por separado para asumir la secretaría general de JxCat. En declaraciones en Rac1, Sànchez ha reclamado "unidad" a dos personas que son "carismáticas y con una personalidad fuerte".



Sànchez ha hecho un llamamiento a "todos a los dirigentes" del partido para que "entiendan que más allá de su figura personal hay un equipo" y ha advertido: "La victoria política sólo será posible si trabajamos con un mínimo de lealtad de grupo". Según Sànchez, cuando se toma una decisión, esta decisión tienen que defenderla todos aquellos que compartan el mismo espacio político, aunque no todos se sientan identificados con esta directriz o reciban críticas de otros sectores. En este sentido, ha afirmado que el partido tiene que cerrar filas" en torno a la candidatura olímpica del Pirineo, como defiende el partido, y ha reconocido que no cree en los "liderazgos carismáticos" sino sobre todo en la "racionalidad".

La retirada de Elsa Artadi

Después del anuncio de Elsa Artadi de retirarse de la política, Sànchez le ha expresado su "agradecimiento y apoyo" y ha dicho que este mismo lunes se reunirá con el grupo municipal de JxCat en Barcelona para analizar escenarios. "Si hay más de un candidato, se harán primarias", ha explicado Sànchez, partidario de no "precipitarse en las decisiones y de esperar a que la nueva dirección de JxCat tome las riendas después del congreso del 4 de junio.

También se ha referido a las informaciones de El Periódico y El Español, que señalan que el exdiplomático ruso y empresario Nikolai Sadovnikov se reunió con Carles Puigdemont el 26 de octubre del 2017, un día antes que el entonces presidente catalán proclamara la Declaración Unilateral de Independencia (DUI). A Sànchez no le constan estos contactos y, además, considera que el relato de la trama rusa "es una invención sin ningún fundamento", un "argumento demasiado cutre para intentar tapar el escándalo de las escuchas telefónicas" a través del sistema Pegasus. Finalmente, Sànchez ha admitido que su decisión de suspender cautelarmente de militancia hace unos años a Eduard Pujol, cuando le llegó un informe sobre supuestos casos de acoso sexual, fue "enormemente injusta" ya que aquellas denuncias no se concretaron.