El hasta ahora secretario general de Junts, Jordi Sànchez, será el nuevo director de la fundación de la Crida Nacional per la República, que está llamada a ser el think tank de Junts per Catalunya, según varias fuentes de la formación consultadas por Efe. El nombramiento se acordó en una reunión celebrada en torno a la Semana Santa, con posterioridad al consell nacional de Junts que se celebró en Alcarràs (Segrià) el 2 de abril, en el que Sànchez anunció que no optará a revalidar el cargo en el congreso de junio. En esta reunión del patronato de la fundación, el presidente de la Crida, Antoni Morral, propuso nombrar a Sànchez como director de la fundación, que ya está constituida formalmente, y es un cargo remunerado desde el que espera galvanizar la entidad.
Con este movimiento, la Crida Nacional se reactivará y tomará nuevo impulso para ser la fundación de Junts, formación con la que tiene previsto firmar un convenio de colaboración a principios de mayo, cuando la fundación también apruebe su plan de actuación. Las mencionadas fuentes apuntan que la figura de Sànchez como director ayudará a establecer las relaciones con Junts y consideran que la Crida permitirá "abrir la reflexión política y estratégica" y poner "las luces largas".
Congreso en junio
Junts per Catalunya renovará su dirección en un congreso en junio, con la incógnita de si Carles Puigdemont continuará como president y con varios sectores del partido que optan para llenar la vacante en la secretaría general que deja Sànchez. El día que anunció su paso atrás, Sànchez hizo un llamamiento a la unidad, para tejer una lista de consenso para la nueva cúpula del partido, que deje de lado las diferencias entre corrientes. Ha indicado en este sentido en las últimas semanas que Jordi Turull es "un buen líder" y que "seguro" que puede ser "bueno" para relevarle en el cargo. Respecto a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, que también suena como candidata a liderar la formación, Sànchez ha afirmado no tener "ninguna queja de deslealtad" y ha argumentado al respecto que el "nunca" había planteado las lealtades "en clave personal".
La Crida Nacional per la República fue el instrumento político impulsado en el 2018 por el president Carles Puigdemont y el mismo Jordi Sànchez para intentar aglutinar el conjunto del independentismo, especialmente las bases que secundaron el referéndum del 1-O. Nunca estructurada en la práctica como partido, las bases de la Crida acordaron en septiembre del 2020 convertirse en la fundación de Junts, que ahora se reactivará con Sànchez como director.