“Pensaba que todo eso iba a tener un impacto negativo en mis jugadoras, por supuesto en Jenni y, por extensión, en la selección. Allí pensé en la manera de poder llegar a la normalidad de una selección que ha sido campeona del mundo”. Jorge Vilda ha asegurado delante del juez del juicio por el beso no consentido de Luis Rubiales a Jenni Hermoso que en el avión de regreso a España después de que la selección femenina ganara el Mundial de 2023 habló con el hermano de la futbolista por la “preocupación” que tenía en ese momento y para “intentar normalizar la situación pensando en el futuro, en la celebración y en la selección”. Durante su declaración como acusado, ha negado que presionara a Rafa Hermoso: “No va más allá de cinco minutos, hablamos de fútbol, de lo bien que ha estado su hermana, le pregunto si habían visto el beso y que les parecían y él lo tilda de anecdótico y de algo sin importancia”, ha verbalizado. ¿Por qué se acercó a él? “Viene de una reflexión que yo estaba teniendo en mi asiento viendo la relevancia que estaba cogiendo todo en torno al beso a nivel mediático y me empecé a preocupar porque se le estaba dando muchísima más importancia a algo que había pasado y le estaba restando importancia al gran éxito que habíamos conseguido después de tanto tiempo”, ha sostenido.

 

Asimismo, Jorge Vilda ha negado categóricamente que recibiera instrucciones de Luis Rubiales para hablar con el hermano de Jenni Hermoso. “¿Dado el poco éxito que ella había tenido con Hermoso, le pidió que fuera a hablar con su hermano?”, le ha preguntado la fiscal. “No, en ningún caso. En alguna declaración se han podido confundir porque siempre fue motu propio, fue por voluntad propia”, ha subrayado. “¿Esa preocupación no era también por lo que podía pasar con el presidente y lo que le pudiera repercutir a usted?”, ha insistido la fiscal. “Mi preocupación era por el equipo y la selección. [...] En ningún caso pensé en Rubiales”, ha reiterado él. “Después de 20 años de profesión, sé cómo afecta la presión mediática al rendimiento, me estaba preocupando”, ha añadido.

Además, ha desmentido que dijera al hermano de Hermoso que si la jugadora accedía a grabar un video para exculpar a Luis Rubiales le iría “bien profesionalmente”. “En ningún caso, es falso. Quien lo diga falta a la verdad o miente”, ha esgrimido. A preguntas de su abogado, Luis Jordana, se ha expresado en la misma línea: “Lo que transmití fue mi preocupación por lo que podía producir esta carga mediática a Jenni”. Concretamente, cuando declaró como testigo, Rafa Hermoso aseguró que la última frase que le dijo Vilda fue que tuvieran en cuenta las “consecuencias personales y profesionales que todo esto podía tener” para Hermoso.

“Yo percibí alegría, celebración y jolgorio”

“¿No percibió malestar o incomodidad por los acontecimientos?”, le ha preguntado la fiscal. “No percibí nada, estaba muy pendiente del episodio de mi hija y cuando le trasmitieron a Carmona que había fallecido su padre. Yo percibí alegría, celebración y jolgorio”, ha contestado. Preguntado por el beso no consentido, ha relatado que en el césped del estadio después de la entrega de medallas fue cuando pudo “escuchar algún comentario en torno al beso”, sin que nadie le diera “mayor importancia”. Posteriormente, en el avión empezó a “ver noticias” y la “bola mediática” que se estaba creando. “Estando en segunda familia, había conversaciones a medio metro de gente de gabinete y de prensa de la Federación que yo podía escuchar. Hablaban sobre el impacto mediático que estaba teniendo el beso y de buscar un consenso o un comunicado, pero nada específico. Estaban dando vueltas a saber cómo se podía hacer de algún tipo de forma parar todo lo que estaba pasando”, ha narrado. 

“No quería importunarla, estaba con sus amigas más cercanas y quería respetarlas”

La fiscal también le ha preguntado por qué no habló directamente con Jenni Hermoso si estaba “tan preocupado” por ella. “No vi oportuno hablar con ella, no quería importunarla. Estaba con sus compañeras y amigas más cercanas (Misa Rodríguez, Irene Paredes, Alexia Putellas y Laia Codina). Y estaban en su celebración, quería respetarlas”, ha señalado. Y ha hecho un poco de autocrítica después de ver que Jenni Hermoso lamentó durante su declaración que se sintió abandonada por la Federación: “Vi que se sentía dolida porque yo no le había preguntado, igual tenía que haberle preguntado cómo estaba”. “Lo que todo el mundo sentía era alegría y jolgorio, a nadie se le escandió una luz de alarma porque algo había pasado allí”, ha reiterado. “En ningún momento presencié ni nadie me dijo que se estaba sintiendo presionada, cuando la vi con la cara cruzada y de preocupación, pensaba que todo lo que estaba leyendo no le estaba gustando igual que a todos los demás”, ha concluido.