“El fascismo ha vuelto a Catalunya”. “Pablo Llarena tiene unos profundos valores morales”. “[El procés es] un golpe de Estado iniciado y protagonizado desde las propias instituciones del Estado”. Las tres frases las escribió José María Macías (Barcelona, 1964) a finales de marzo de 2018 en un artículo publicado en Internet. Era vocal del Consejo General del Poder Judicial, habían pasado seis meses del referéndum del 1 de octubre, la mitad del Govern de la Generalitat estaba en la cárcel y Carles Puigdemont y otros consellers se habían ido al exilio. Seis años más tarde, su cruzada contra el procés perdura, ahora contra la ley de amnistía. “Se está generando una clase política que puede actuar con impunidad porque sus actos no van a generar ningún tipo de responsabilidad” y “se convencerá a aquellos que nunca han querido respetar la ley ni la Constitución que pueden seguir sin hacerlo porque no hay consecuencias”. Esto lo afirmó en noviembre de 2023 en una entrevista en Onda Cero, cuando todavía no se conocía el redactado de la ley de amnistía y después de que el CGPJ aprobara una declaración que arremetía contra la norma del olvido penal. Casi nueve meses después, en julio de 2024, fue nombrado a propuesta del Senado (donde el PP tiene mayoría absoluta) como magistrado del Tribunal Constitucional. Y ahora el TC lo ha apartado de las deliberaciones sobre la amnistía alegando que, durante su etapa en el CGPJ, se creó una “posición jurídica previa” sobre la norma. De esta forma, se fuerza la mayoría progresista que tendrá que dictaminar sobre la amnistía. ElNacional.cat repasa sus declaraciones más sonadas.

📝 El Constitucional aparta de los debates sobre la amnistía a José María Macías, crítico con la ley

 

Volvamos a 2018. José María Macías era vocal del CGPJ y arremetió con dureza contra el independentismo: “La incapacidad de los partidos nacionalistas para resistirse a la fuerza del Estado de derecho los ha llevado a renunciar, en la práctica, a las instituciones y a animar y jalear la calle con organizaciones de corte fascista cuya presencia en Catalunya nos tendría que producir a todos la más honda de las preocupaciones y cuya finalidad no es otra que destruir las instituciones desde fuera una vez que se ha evidenciado que no es posible destruirlas desde dentro”, arguyó. Asimismo, acusó a los CDR de impulsar un férreo control coactivo sobre la población, denunciando y exigiendo fidelidad ideológica” y de querer “imponer una ortodoxia nacionalista que señale a todo aquel que no la comparta”. “Manifestaciones ilegales violentas para ocupar sedes de instituciones públicas o amenazas a jueces y políticos son algunos de los episodios que estamos viviendo en estos días en Catalunya, protagonizadas por esas nuevas «organizaciones» y que en nada desmerecen las actitudes de las camisas pardas [de los nazis] o negras [de los fascistas italianos] del pasado, copiando milimétricamente su retórica fascista”, añadió.

Amigo declarado de Pablo Llarena: “Su compromiso con el Estado de derecho no cede frente a ningún sacrificio”

“Me precio en llamar amigo al juez Llarena”, reconoció en ese mismo artículo. Y lo describió como un “hombre de una inteligencia extrema, analítico hasta el agotamiento, con unos profundos valores morales, cuyo compromiso con el Estado de derecho y la democracia no cede frente a ningún sacrificio y empeñado en la defensa de una mayoría de la ciudadanía que las actitudes fascistas y totalitarias pretenden hacer invisible e inexistente”. “Hace grande la palabra juez”, subrayó.

“La amnistía busca el interés de Pedro Sánchez”

De nuevo a la actualidad, en la entrevista de noviembre de 2023 en Onda CeroJosé María Macías también consideró que el primer pronunciamiento del CGPJ, caducado y dividido, era un “toque de atención sin precedentes” que respondía ante una cuestión cuya “gravedad” tampoco tenía precedentes. “Es algo insólito en la democracia española, que se pone en riesgo con una propuesta que parece que se quiere sacar adelante”, argumentó. Asimismo, sostuvo que “dejar sin efecto las sentencias supone una violación de la división de poderes” y esgrimió que, con la norma, se estaba “haciendo responsable a los jueces de la situación vivida en 2017”. “La ley de amnistía no busca el interés general, sino el de Pedro Sánchez”, añadió en una entrevista a OK Diario en febrero de 2024. Además, en los micrófonos de la COPE tildó de “payasada con mala intención” la querella de Sumar contra los vocales del CGPJ que votaron a favor de la declaración contra la amnistía (el Supremo la inadmitió).

Más críticas. En un discurso en mayo de 2024, proclamó que a la justicia “se la mancilla” cuando “se aprueban leyes por interés personal que hacen que no todos seamos iguales ante la ley y los tribunales, que las sentencias que han dictado esos tribunales no se cumplan, que los criminales que han intentado destruir la paz de una nación no sean responsables de sus actos y que incluso seamos los demás los que tengamos que pedir perdón por ser víctimas de sus crímenes”. En diciembre de 2023, preguntado en una entrevista en 20 Minutos por la tensión entre el Poder Judicial, los partidos políticos y la Moncloa, contestó que el enfrentamiento actual no había sucedido “nunca jamás” en la historia de España: “El ataque sistemático, el conflicto sistemático, la guerra institucional y la voluntad de anular un poder no habían pasado nunca”. En una entrevista en El Español en junio de 2024, lamentó que España esté en una situación “crítica de inflexión constitucional por el problema territorial”.

José María Macías y el presidente del TC, Cándido Conde-Pumpido / Foto: Europa Press

Asimismo, en una entrevista con Federico Jiménez Losantos en EsRadio, tildó de “pacto indigno” y en “términos ya mafiosos” el acuerdo entre el PSOE y Junts para la investidura de Pedro Sánchez. “Que el PSOE firme un acuerdo con un prófugo de la Justicia para perseguir a los jueces que le investigan es indicio de una amenaza programada al Poder Judicial”, añadió en un artículo publicado en El Español. Más atrás, en 2018, en un artículo en el periódico alemán Handelsblatt, calificó de “grave error” la decisión de la justicia alemana de no entregar a Carles Puigdemont por el delito de rebelión. Por cierto, en su felicitación navideña de 2023 apeló a Dios para que, en “tiempos de incertidumbre y miseria moral” liberara a los jueces del “acoso”.

“Sánchez es un señor al que le gusta la mampostería”

Además, José María Macías también ha cargado directamente contra miembros del Gobierno. En una entrevista en febrero de 2024 en Confilegal, afirmó que Pedro Sánchez es un “señor al que le gusta la mampostería y levanta muros por todas partes”. “Si en ese lado del muro están él y sus amigos, yo evidentemente estoy al otro”, verbalizó. “No estoy con esa concepción totalitaria y absolutista que tiene del poder en esa colonización de las instituciones que me parece nefasta para su supervivencia, no estoy en el insulto sistemático a todo el que no está de acuerdo conmigo”, añadió. Asimismo, cargó contra el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños: “Debe ser una persona creíble, y le he visto hacer y decir cosas contradictorias, incluso expresar con absoluto desparpajo cosas que él sabe que no son ciertas”.

Miembro de la asociación conservadora de jueces, alto cargo con Jordi Pujol y perfil duro contra el Gobierno desde el CGPJ

José María Macías fue miembro de la Asociación Profesional de la Magistratura (conservadora y mayoritaria entre los jueces) de 1991 a 2005. Entre 2002 y 2003, en los últimos años de Jordi Pujol como president, fue director general de Asuntos Contenciosos de la Generalitat de Catalunya. Y en 2005 cogió la excedencia como juez para trabajar en el despacho de abogados Cuatrecasas, Gonçalves Pereira. Llegó al CGPJ en 2015 para sustituir a Mercè Pigem (que había sido propuesta por CiU y dimitió en noviembre de 2014 después de ser sorprendida entrando en España con 9.500 euros en efectivo procedentes de Andorra). Durante su etapa como vocal del CGPJ, Macías fue uno de los vocales más críticos y duros contra Pedro Sánchez.

Profesor de la Universitat Autònoma de Barcelona durante 33 años

Entre 1991 y julio de 2024, fue profesor del Departamento de Derecho Público y Ciencias Histórico-Jurídicas de la Universidad Autònoma de Barcelona y profesor asociado de Derecho Administrativo y de la Unión Europea. Ahora está en situación de excedencia forzosa. Licenciado en derecho por la UAB en 1988, ingresó en la carrera judicial dos años más tarde. Fue juez en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Rubí, en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Mataró, en el Juzgado de lo Penal Único de Terrassa y en el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Barcelona. Además, fue miembro electo de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.