Juan Carlos I, rey emérito, ya ha llegado a Galicia. Su avión ha aterrizado al poco de las 13.30 horas en el aeropuerto de Peinador, en Vigo, hasta donde se ha desplazado a bordo de un avión privado procedente de Londres, y desde donde ha salido en coche dirección Sanxenxo acompañado de su amigo Pedro Campos. Tal como pasó en al primera ocasión que volvió al Estado, un visible dispositivo de seguridad se ha desplegado en el aeropuerto de Vigo, a los alrededores del cual se han congregado docenas de periodistas acreditados con cámaras para tratar de captar un plano o una fotografía de su paso fugaz por el aeródromo.
Por segunda vez desde que se marchó a Abu Dabi para alejarse de sus problemas con la justicia en 2020, vuelve al estado español. Como hace un año, el Borbón se desplaza a Sanxenxo para asistir a las regatas de la Copa de España, que organiza el club náutico de la localidad donde participa su barco, el Bribón.
Esta vez, su retorno a España también ha despertado expectación y reticencia por parte de La Zarzuela, la cual no sabía de su retorno hasta que se publicó en la prensa. Todo ello ilustra la difícil relación en el seno de la casa real española. El entorno del emérito defiende su retorno al estado español evidenciando que ya no está en el punto de mira de la justicia, sin embargo, su imagen sigue siendo un peso muerto por la monarquía española, que no consigue pasar página.
El rey emérito está siguiendo los planes de viaje que se habían dado a conocer. Por una parte, ha pasado por el Reino Unido, antes de volar a Galicia. Como ya se anticipó, su llegada ha sido este 19 de abril y se espera que su partida sea el 23 de abril. Desde antes de su llegada, la prensa se ha concentrado ante la residencia del presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo (Pontevedra), Pedro Campos, por la llegada del rey emérito.
Más visitas en el futuro
Si la falta de comunicación del emérito y La Zarzuela tensa la relación, el hecho de que este planee venir de forma más recurrente no tiene que ser un factor que ayude. Juan Carlos I se querría entrenar en su velero Bribón para competir en el campeonato del mundo de la clase 6mR, que tendrá lugar en la isla británica de Wight entre el 31 de agosto y el 8 de septiembre. Si quiere ganar esta competición, no tendrá bastante con entrenarse dos o tres días en la localidad gallega, afirma el entorno del emérito. Por su parte, la Casa Real habría pedido a Juan Carlos I que posponga estas visitas de entrenamiento hasta después de las elecciones municipales del próximo 28 de mayo.
Su vista al Reino Unido
Antes de poner un pie en Sanxenxo, Juan Carlos I ha viajado a Londres. Allí se le ha visto reuniéndose con amigos y en un partido del Madrid en el estadio Stamford Bridge. El Daily Mail afirmó que Juan Carlos I y Carlos III habían desayunado juntos; sin embargo, la monarquía británica ha confirmado a la embajada del Reino Unido en Madrid que no ha habido ningún encuentro entre los dos.