El patriarca de los Borbones pasa por las horas más bajas de su vida. El heredero de Franco está tan salpicado por los presuntos casos de corrupción que el heredero del heredero, Felipe VI, ya busca las maneras de sacárselo de encima y eludir así sus propias responsabilidades. La monarquía se tambalea y el actual monarca trata de salvarla aunque sea al precio de sacrificar a su padre.
Sea como sea lo que pueda pasar en las siguientes semanas, hay una cosa que no cambiará, al menos de momento. El buque insignia de la Armada Española, el portaaviones Juan Carlos I (L-61), no cambiará de nombre. La nave, que puede llevar aviones pero que técnicamente es un barco de asalto anfibio, es decir, que puede tener capacidad aérea pero también puede transportar y desembarcar tropas, mantendrá su nombre aunque su titular pueda acabar incluso juzgado por los presuntos casos de corrupción.
Así lo avanza El Confidencial Digital, que se hace eco de una pregunta del senador de Compromís, Carles Mulet, dirigida al Gobierno, sobre la posibilidad de cambiar el nombre del Juan Carlos I dada la situación en que se encuentra el rey emérito. La respuesta ha sido clara, de momento no hay previsto ningún cambio de nombre.
"Comportamientos éticamente reprobables"
Según el medio citado, el pasado 9 de junio se elevó la pregunta, señalando que los "comportamientos éticamente reprobables" del anterior monarca ponían en duda la necesidad de mantener el nombre en el buque insignia de la Armada Española.
La respuesta ha sido clara: "El barco de la Armada L-61 lleva el nombre de Juan Carlos I en tanto que fue el primer jefe de Estado tras la restauración de la democracia y la aprobación de la Constitución Española de 1978 mediante referéndum celebrado el 6 de diciembre de 1978".
El monarca está siendo investigado por la Fiscalía, pero el Gobierno no prevé ningún cambio. Al menos, de momento.
En la Antártida también se mantendrá el nombre
El mismo senador ha preguntado al Gobierno si prevé igualmente cambiar el nombre de la base de investigación científica española en la Antártida, que también recibe el nombre de Juan Carlos I. De momento, Mulet espera respuesta.