Ciutadans vive las horas más negras de su corta historia. Concatenan derrotas electorales, las encuestas los auguras un futuro todavía peor y el partido se encamina a una refundación incierta. En todo este contexto, ha habido una sangría de militantes que ha abandonado la formación naranja a toda velocidad. Se podría pensar que justamente del que no se puede permitir prescindir el partido es de sus militantes, sin embargo, esta ha sido el caso de Juan Marín, quien fue vicepresidente de la Junta de Andalucía y lideró la formación a su desaparición del hemiciclo andaluz. A diferencia de como se interpretó inicialmente, Marín ha dejado claro que no ha pedido la baja del partido de forma voluntaria: "Quiero seguir afiliado"
Marín no abandona el partido por el porrazo de los comicios andaluces, sino por su nombramiento como presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Andalucía a propuesta de Juanma Moreno, hecho que ha generado un conflicto en el seno de Ciutadans. El exvicepresidente andaluz ha sostenido que su nueva responsabilidad al frente de un "órgano independiente y colegiado" que no forma parte del Gobierno del PP. Sin embargo, la formación naranja no lo acaba de ver así y el secretario de Organización del partido, Carlos Pérez-Nievas, le indicó que tenía que darse de baja.
"No me doy de baja voluntaria, me lo pide el partido. Me lo pidió el secretario de Organización, Carlos Pérez-Nievas, el lunes pasado a las 22.30 horas. Me dijeron que había algunas personas a la Ejecutiva Nacional que no estaban de acuerdo", ha afirmado Marín en unas declaraciones recogidas por Europa Press. Ha defendido que no ha cometido ninguna infracción recogida en los estatutos de la organización. "Se me pidió la baja, siempre he sido leal a mi partido y sigo siéndolo, es curioso que yo quiera seguir siendo afiliado, pero haya gente del partido que no esté de acuerdo", ha reprochado,
Inés Arrimades fue informada
Las disputas internas dentro de Ciudadanos no paran de sucederse. En esta ocasión, el resultado es similar a los otros casos: un ex cargo de Ciutadans se marcha. La diferencia es que este quería seguir al partido. Según ha narrado el mismo Marín, la presidenta del partido, Inés Arrimadas, estaba al corriente de su nombramiento al frente del CES. "Ha tenido siempre perfecto conocimiento de cuál era la propuesta y ha estado de acuerdo con eso", por eso considera "totalmente incomprensible" la petición de baja del partido", ha afirmado.
La sorpresa para Marín aumenta cuando después de que trascendiera su petición de baja a los medios intentas hablar con Arrimadas sin conseguir ninguna respuesta. "Creo que estamos en un momento tan extremadamente delicado que nadie puede entender muchas decisiones que se están tomando. Nadie me impedirá que yo siga defendiendo los valores que defiendo, aunque me haya pedido que por favor me diera de baja como militante", ha sentenciado.