Juanma Moreno ha sido investido presidente de Andalucía con "la afectuosa abstención" de Vox, prácticamente un mes más tarde de la victoria del Partido Popular en las elecciones andaluzas. El líder popular ha contado este jueves con el apoyo de sus 58 diputados, que conforman mayoría absoluta en el Parlamento. Los 37 votos que suman el PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía no han podido evitar que Moreno presida de nuevo la Junta. Tampoco lo han podido evitar los catorce escaños de la formación de extrema derecha, que todavía no había revelado el sentido de su voto: finalmente, la ultraderechista Macarena Olona ha optado por una "afectuosa abstención", según sus palabras. Recordemos que Ciudadanos no consiguió ningún diputado en las últimas elecciones y, por lo tanto, desapareció del Parlamento andaluz.

Superado el debate de investidura, Moreno tomará posesión del cargo este sábado en el palacio de San Telmo de Sevilla y su nuevo gobierno empezará a trabajar la próxima semana. Sin embargo, desde este jueves es el presidente que liderará el primer gobierno monocolor del PP en la historia de Andalucía y repite en el cargo después de la etapa del ejecutivo bipartito PP-Cs que acabó con la hegemonía socialista. El debate se ha celebrado entre este miércoles y jueves, sin grandes novedades.

Una "lección política" en el resto de España

El presidente andaluz ha insistido en pedir diálogo y ofrecer acuerdos a todos los grupos sin "vetos cruzados" ni vías de diálogo excluyentes, con el fin de mantener el supuesto perfil moderado que siempre ha querido fomentar. Es por esto que ha solicitado el apoyo de todos los grupos a su investidura, porque cuanto más apoyo más fortaleza "para transformar" Andalucía. Al mismo tiempo, no ha querido transmitir la idea de convertir su mayoría absoluta en un "rodillo" durante cuatro años. Una mayoría absoluta que refleja "la voluntad de un pueblo andaluz que quiere serenidad, seguridad, estabilidad, ambición y que quiere seguir avanzando". Pero esta mayoría absoluta no puede descentrarlos de "el objetivo fundamental de poner a los andaluces en el centro del trabajo". Moreno ha tildado el debate de investidura de "lección política" en el resto del estado español y a las Cortes Generales. De hecho, se ha mostrado convencido de que esta sesión pasará a la historia por su clima de "serenidad y sensatez", "ejemplo de política útil, responsable y educada".

El jefe de la oposición y presidente del Grupo Socialista, Juan Espadas, se ha limitado a ofrecer cinco grandes acuerdos al PP para consensuar medidas contra la inflación; la defensa, financiación y mejora de los servicios públicos; la ejecución de los fondos europeos; cambio climático e igualdad. También ha instado Moreno a una "rendición permanente de cuentas" en el Parlamento y que no bloquee la acción de la oposición al nuevo ejecutivo.