La sombra del tamayazo recorre el panorama político español; y lo hace en un contexto donde una parte del PSOE se muestra contraria a la línea de dirección de Pedro Sánchez, con los sectores más derechistas del partido clamando públicamente contra la amnistía a los encausados por el Procés y contra unos eventuales pactos con el independentismo catalán para investir a Sánchez, como lo han hecho ya el expresidente español Felipe González, el exvicepresidente Alfonso Guerra, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garcia-Page, y el líder del PSOE en Aragón, Javier Lambán. Con este panorama dentro de los socialistas, el presidente de la Junta de Andalucía y líder del PP andaluz, Juanma Moreno, ha llamado este viernes a los diputados del PSOE a rebelarse "por sus principios" y romper la disciplina de partido en el debate de investidura de la próxima semana del líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo.
En una entrevista en El Confidencial, Moreno anima a la ruptura del voto entre los socialistas para evitar las cesiones a los independentistas y apela a su "conciencia de Estado" para recaudar los cuatro apoyos que todavía le faltan a Feijóo para sacar adelante su investidura como presidente del Gobierno. "Más allá de la lógica disciplina de partido, que tiene que haber, a veces se llega a extremos en los cuales los diputados tienen que rebelarse por sus propios principios", recalca el dirigente andaluz, que precisa que el acta del diputado es personal, aunque se presente a través de una formación política, y que es el diputado quien toma las decisiones.
Moreno asegura que ha escuchado a muchos diputados socialistas, "no uno ni dos", que no están de acuerdo con las tesis de Pedro Sánchez y una hipotética amnistía para los independentistas catalanes, aunque cree que "quedarán ahogados por la disciplina de partido y el miedo". "Sánchez ha provocado que lo que hable salga del partido expulsado de manera inmediata y sea condenado al ostracismo dentro del PSOE", critica Moreno en referencia a la expulsión del partido al exdirigente socialista Nicolás Redondo Terrero, motivada por el "reiterado menosprecio" a las siglas, según argumentó la dirección socialista actual.
Peligro de 'tamayazo' en el Congreso
La del tamayazo y las tránsfugas es una práctica de política sucia que no sería la primera vez que el PP pone en práctica, como hizo comprando a los dos diputados de UPN en la última legislatura para que votaran en contra de la reforma laboral de Yolanda Díaz, contra la directiva dada por su propio partido. Tampoco sería la primera vez que unos representantes políticos del PSOE votan en contra de sus siglas, como cuando Eduardo Tamayo —quien da el nombre popular a la práctica— y María Teresa Sáez votaron contra la investidura del candidato socialista a la presidencia de la Asamblea de Madrid y facilitaron que Esperanza Aguirre llegara a gobernar la Comunidad.
Conversaciones entre Feijóo y García-Page
En este contexto, Alberto Núñez Feijóo, ha llamado este jueves al presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, uno de los socialistas más críticos con Sánchez y con los pactos con el independentismo catalán, en el marco de la ronda de contactos con presidentes autonómicos que inició hace unos días de cara al debate de investidura que tendrá lugar dentro de cinco días en el Congreso de los Diputados. Así y todo, el presidente de Castilla-La Mancha ha admitido que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo podría encontrar entre los socialistas algún voto tránsfuga de cara a la investidura de la próxima semana, sin embargo, ha advertido que él no ampararía votos así. En una entrevista en la Cadena Ser, Page ha afirmado este jueves que "a quien esté jugando a la falta de votos del PP, su déficit electoral, lo compensen tránsfugas del PSOE, puede ser que los encuentre, pero sin duda no será porque yo los busque ni yo los ampare". "Las cosas tienen que ser limpias. El gobierno de España, el que sea, no puede estar nunca sometido a tamayazos de ningún tipo. Y lo he dicho en el primer momento. Por mucho que desde Vox hablen de socialistas buenos. A mí me dejan a caer de un burro cada día. Yo seré coherente siempre. Quiero poder mantener una hemeroteca coherente con el gobierno que sea. He discrepado con gente como el presidente Bono. No tengo más credibilidad ni más mérito para tener mayoría absoluta", ha concluido.