El diario alemán Telepolis ha criticado con contundencia la manera en que se trasladó a los presos y las presas políticos el pasado viernes hasta las prisiones madrileñas. En un artículo publicado este domingo, el rotativo ha tildado el traslado de "tortura" y "odisea" y ha cuestionado las condiciones en que se desarrollará el juicio del 1-O.
"No se puede hablar de un 'transporte VIP' tal como lo hace hoy el diario español La Razón sólo porque se utilizó un autocar nuevo. Viajar durante siete horas en una celda demasiado pequeña para levantarse es una tortura", escribe el periodista Ralf Streck.
El autocar que trasladó a los líderes independentistas hasta Madrid tenía 14 celdas del tamaño aproximado de un lavabo de avión. En cada celda había una pequeña ventana, pero estaba encima de todo el compartimento y eso hacía que si querían ver el exterior, los presos se tenían que poner de pie y estirarse bastante hacia arriba. No se trataba, pues, de una ventana sino de un simple orificio para que entrara la luz. Los presos no se veían entre ellos y eran grabados y observados en todo momento por la policía a través de pantallas instaladas en el espacio de conducción. Además, viajaban sin ninguna pertinencia.
El juicio del 1-O, en cuestión
El diario alemán considera que "la justicia española ha sido politizada y ha inventado una rebelión" y recuerda que Alemania no vio ningún hecho delictivo en los hechos del 1-O. "Hubo una violencia masiva de las autoridades españolas contra los votantes. Las invenciones españolas no fueron compradas por el poder judicial alemán. Ni siquiera después de un examen exhaustivo se vio rebelión para extraditar a Carles Puigdemont a España. Y los poderes judiciales de Bélgica, Suiza y Gran Bretaña tampoco entregan a los exiliados catalanes", asegura el Telepolis.
En este sentido, el periodista Ralf Streck reivindica que no hay "fundamento jurídico" para juzgar a los presos y critica que los tribunales españoles no permitan la asistencia de observadores internacionales al juicio.
El silencio ensordecedor de Bruselas
Finalmente, el artículo también carga con dureza contra el comportamiento de la Unión Europea en el conflicto catalán, que califica de "decepcionante". "Después de todo, la UE y sus países miembros quieren actuar como defensores de derechos humanos en todo el mundo, pero guardan un silencio ensordecedor sobre lo que está pasando en España", critica el diario alemán.
El escrito recuerda que la autodeterminación es un derecho fundamental recogido en el artículo 1 de la normativa europea que España ratificó en el Pacto Social de las Naciones Unidas. "Pero Bruselas sigue completamente en silencio con Catalunya. Prefiere ejercer el papel de defensor de los derechos humanos en el resto del mundo en vez de cuidarlo internamente", concluye el artículo.