El juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha desestimado el recurso del exministro socialista y diputado, José Luis Ábalos, contra la petición de su suplicatorio en el Congreso de los Diputados para poder investigarlo. Según la resolución comunicada este martes, el magistrado afirma que existen "indicios bastantes" contra él y "no meras o simples sospechas", y como Ábalos es aforado, necesita el permiso de la cámara baja para poder investigarlo, y especialmente su patrimonio. Así, el magistrado que investiga una parte del caso Koldo -sobre el supuesto tráfico de influencias por la venta de mascarillas durante la pandemia- descarta el recurso de Ábalos contra el auto, que dictó el 18 de diciembre pasado, en la cual pide al Congreso que suspenda su inmunidad y lo pueda investigar al completo.  Paralelamente, el instructor del caso Koldo, en una segunda resolución, no ha dado la autorización preceptiva al PSOE para tirar adelante la querella por injurias y calumnias contra el empresario Víctor de Aldama, que aseguró que pagaba a diferentes cargos socialistas para obtener contratos públicos.

"No parece que pueda decirse, con razón, que el auto impugnado descansa en meras o simple sospechas, sin indicios bastantes, ni que adolece del rigor necesario, razones, todas ellas, que determinan la íntegra desestimación del recurso interpuesto", responde el magistrado al aforado, expulsado del PSOE. Inicialmente, el juez investiga a Ábalos, su mano derecha, Koldo García, y el intermediario Víctor de Aldama por los delitos integración en organización criminal, tráfico de influencias y cohecho.

Tres pisos bajo sospecha

En la resolución, el instructor detalla que "estos indicios que no se fundamentan únicamente en la declaración de Víctor de Aldama", ni solo con la entrega de dinero.  Para el juez "llama la atención que nada menos que tres inmuebles, vinculados a Ábalos de forma directa o indirecta, vengan siempre a presentar como denominador común la continua presencia de Aldama, beneficiado, como se ha dicho, por las comisiones generadas por las adjudicaciones que entidades dependientes del Ministerio del que Ábalos era titular habían concertado con la empresa cuyos intereses económicos promovía Aldama".

Por ejemplo, el juez expone que Aldama cedió un piso de lujo a la entonces pareja del exministro durante dos años, en una "pretendidamente graciosa cesión de un piso" sin pagar ningún alquiler, haciéndolo pasar como un piso de empresa y de la cual -según el magistrado- Ábalos, en su declaración al juzgado, dio "una respuesta confusa".

Más indicios, aparte de Aldama

Aldama aseguró al juez que pagó prebendas al entonces ministro para obtener la concesión de la compra de mascarillas por organismos estatales, y aportó documentación sobre otras supuestas irregularidades en concesiones, como de obras.

En el mismo auto, el juez rechaza la nulidad de las actuaciones instada por Ábalos basándose en que agentes de la  Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que participaban en la investigación que se seguía en la Audiencia Nacional, habrían procedido sin autorización judicial previa, a la apertura de un sobre cerrado dirigido expresamente al exministro y que portaba un hermano del investigado Koldo García, y que fotografiaron los documentos que contenía.


El juez ha destacado que la UCO ha resaltado en un informe que dicho sobre no estaba cerrado ni estaba nominalmente dirigido a Ábalos, sino que se trataba de un sobre abierto y sin destinatario aparente. El magistrado añade que, en cualquier caso, los documentos fotografiados carecen de toda relevancia en la investigación de los hechos.

Rechaza la querella del PSOE a Aldama

En un segundo auto, el juez del caso Koldo ha declinado otorgar, en este momento, la preceptiva licencia que solicitó el PSOE para interponer querella por delito de injurias y calumnias contra Víctor de Aldama por el contenido de su declaración ante el instructor. El instructor explica que "en el momento marcadamente embrionario en el que se encuentra la investigación no puede aseverarse la mendacidad de las referidas declaraciones ni tampoco que resulten ajenas al objeto de la investigación". Añade que la apertura, mientras se desarrolla la fase de instrucción, de un procedimiento paralelo por calumnias "generaría inaceptables disfunciones procesales".

Además, el magistrado detalla que las afirmaciones de Aldama que también pagaba sobresueldos a Santos Cerdán, diputado y secretario de organización del PSOE y al ministro de Política Territorial, Ángel  Víctor Torres Pérez,  "son afirmaciones, no mínimamente contrastadas, inhábiles para reputarse indicios sólidos"  para iniciar una investigación contra ellos.

 

No obstante, el magistrado Puente señala que la negativa a conceder la licencia al PSOE, apoyada por la Fiscalía, para querellarse "no es decisión que tenga necesariamente carácter definitivo, y que una vez concluido el juicio o en caso de que la causa termine por inexistencia de indicios, podría llegar a otorgarse".

"Desgraciada" filtración de los interrogatorios

Finalmente, en una providencia, el juez ha rechazado la petición de Ábalos de abrir una investigación sobre la filtración a los medios de comunicación de las grabaciones audiovisuales que contienen la declaración de los investigados ante el propio instructor del Supremo. El magistrado señala que "carece de competencia para esa investigación", y que el exministro, o cualquiera de las otras partes, si lo consideran oportuno, pueden denunciarlo ante los Juzgados de Madrid.

 

El magistrado califica de “desgraciada” esta filtración y admite que las medidas que ha adoptado hasta el momento han sido“ciertamente sin éxito”, para evitar las filtraciones. Y advierte que de ahora en adelante extremará las cautelas para evitar, “en lo posible, que filtraciones parecidas vuelvan a producirse, aceptando por anticipado cualquier sugerencia razonable y factible que pueda proceder de cualquier de las partes en esta dirección”.