El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha dictado este jueves el auto de apertura de juicio oral al expresidente de la Generalitat valenciana Francisco Camps por las presuntas irregularidades en la adjudicación de los contratos a la trama Gürtel. Además de procesarle por los delitos de prevaricación y fraude a la administración, el magistrado incluye también tráfico de influencias.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 considera que ha quedado acreditado que "con el fin de favorecer los intereses económicos de Orange Market, tal y como había ocurrido en las ediciones anteriores de Fitur, y para contentar a sus gestores ante la elevada deuda acumulada hasta el año 2008 en favor de dicha mercantil por la celebración de actos del PP en dicha comunidad".
Según el juez, el que fuera responsable de Orange Market y 'mano derecha' de Francisco Correa en el País Valencià, Álvaro Pérez Alonso 'el Bigotes', y el gerente de dicha empresa Cándido Herrero, "bajo la superior dirección" del líder de la Gürtel y de su 'número dos', Pablo Crespo, "se concertaron con Camps para que éste,como máxima autoridad autonómica, dispusiera lo necesario para que el contrato del montaje del 'stand de Grandes Proyectos' de Fitur fuera directamente adjudicado a Orange Market al margen de la tramitación de procedimiento de contratación alguno".
Además, según el auto de apertura del juicio, "actuaron para que dicha adjudicación ilícita no la asumiera la Agencia Valenciana de Turismo como hasta entonces, sino directamente Presidencia de la Generalitat a través de la Dirección General de Promoción Institucional como centro directivo bajo la autoridad del presidente".
De la Mata detalla a lo largo de la resolución los indicios acumulados contra el expresidente y señala que otros investigados que han apuntado hacia él, como 'el Bigotes', no han hecho una "declaración aislada o inconexa", como invoca la defensa de Camps, sino que existe un "arsenal de indicios, muy consistentes, cada uno de ellos suficientemente acreditado, que permite afirmar" que el exdirigente 'popular' participó directamente en el direccionamiento del contrato.
"Lo hizo para favorecer a Orange Market, como venía haciendo desde 2005, a cambio de su paciencia y resignación ante el impago de la multimillonaria deuda que el Partido Popular de la Comunidad Valenciana tenía y su colaboración al aceptar las ilegales fórmulas de pago que el Partido Popular utilizaba para ir cancelando la indicada deuda", asevera el magistrado.
Así pues, el instructor concluye que la entonces directora general de Promoción Institucional, Dora Ibars, "sí recibió indicaciones de sus superiores en la Generalitat, y más concretamente de Camps, para que actuara en la forma que lo hizo en relación con la adjudicación del stand de Grandes Eventos en Fitur 2009".