El titular del juzgado número 7 de Barcelona dice que la policía española no podía entrar en las escuelas concertadas el día del referéndum del 1 de octubre. El juez ha imputado otro agente de la policía por las cargas del 1-O que formaba parte del mando del operativo de la escuela FEDAC Horta. El magistrado ha indicado que los agentes tenían el encargo de impedir el referéndum en edificios públicos, pero no en centros de propiedad privada, como es el caso de esta escuela.
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya, el encargado de ordenar que no se celebrara el referéndum, decía en su auto que se tenía que hacer "sin afectar a la normal convivencia ciudadana" y añadía que la policía tenía que impedir, hasta el 1 de octubre, la utilización de locales o edificios públicos.
Es es este auto del Tribunal Superior que el juez del número 7 de Barcelona asegura que en el caso del la escuela FEDAC "la actuación policial no estaba amparada por el TSJC" y por eso añade que "hay que preguntarse por qué motivo se actuó, se empujó y se sacudió a las personas que se encontraban allí".
En Barcelona, el informe de la policía admite que entraron, como mínimo, en tres centros concertados más: las escuelas Projecte, Pia de Sant Antoni i Infant Jesús.