El Juzgado de Instrucción 11 de Barcelona ha cerrado la instrucción por la protesta de Arran en la sede del PP de Catalunya el 27 de marzo de 2017 concluyendo que los seis investigados que irrumpieron en la sede actuaron con "claro ánimo de alterar el normal funcionamiento" del partido.
En un auto, el juez considera que los seis investigados "no se limitaron a expresar libremente sus reproches ante el partido sino que pretendieron entrar en el mismo y se mantuvieron en el vestíbulo en un claro ánimo de alterar su normal funcionamiento", lo que constituye un presunto delito de alteración del orden público.
"Nada legitima dicha indiciaria conducta en una democracia consolidada y menos que lo lleven a cabo personas vinculadas a una formación política con representación en el parlamento autonómico", argumenta el juez, en alusión a la CUP, ya que en esa protesta estaban presentes los exdiputados de la CUP en el Parlament Anna Gabriel y David Fernàndez.
Además, tres de los seis investigados, según ha constatado la instrucción, "ocasionaron desperfectos en las instalaciones" al hacer pintadas y pegar pegatinas en el local, por lo que también les atribuye un delito de daños.
El magistrado recuerda que los seis investigados no comparecieron a las citaciones del juzgado y fue necesario decretar su detención, y una vez fueron conducidos ante el juez se negaron a declarar, por lo que no se tiene su versión de los hechos, si bien, a ojos del titular del juzgado "los indicios de su delictiva conducta son claros".
Según el relato del auto judicial, un grupo de personas convocadas por Arran se manifestaron ante la sede del PP en la calle Urgell de Barcelona la mañana del 27 de marzo, en protesta por su oposición al proceso independentista.
Los investigados en un momento dado entraron en el vestíbulo y "pretendieron por la fuerza traspasar otra puerta donde se encuentran las personas que prestan servicios de seguridad", y aunque no pudieron ir más allá de este primer vestíbulo y no penetraron en la sede, impidieron que se pudiera entrar o salir, alterando el normal funcionamiento del partido.