Ni Txell Bonet, mujer de Jordi Cuixart, ni la exconsellera Meritxell Borràs, acusada en el juicio, han podido entrar este martes por la mañana en el Tribunal Supremo. No las han dejado entrar en la sala porque han llegado tarde, a pesar de sus circunstancias. De la misma manera, tampoco han estado presentes los abogados de la acusación particular de Vox, que han llegado tarde.
Como consecuencia de esto, Txell Bonet y Meritxell Borràs han tenido que seguir la declaración por radio desde fuera de la sala de vistas. Las dos han compartido auriculares. Han llegado tarde porque estaban atendiendo medios de comunicación.