Nuevo giro argumental en el Supremo y con máxima tensión. El comisario Ferran López, responsable del dispositivo del 1-O y jefe de los Mossos durante el 155, ha explicado ante el tribunal que juzga a los responsables del procés los mecanismos de coordinación de la policía catalana con los cuerpos estatales el día del referéndum y las jornadas previas. Ha asegurado que "nunca" hubo un dispositivo de los Mossos, sino un mecanismo "conjunto" de todos los cuerpos, en el cual la policía catalana participaba con los binomios en los diferentes colegios, y ha explicado que el mecanismo "quebró" a raíz de la actuación del CNP y la Guardia Civil.
La declaración de López se ha cerrado con la petición de Xavier Melero, abogado de Joaquim Forn, de un careo entre el comisario de los Mossos y el que fue director del gabinete técnico de la Secretaría de Estado de Interior y máximo responsable del operativo policial del 1-O, el coronel Diego Pérez de los Cobos.
Durante su declaración el pasado 5 de marzo en el Supremo, De los Cobos negó que existiera este operativo y llegó a asegurar que el comisario mentía. El coronel de la Guardia Civil afirmó que los Mossos no sólo no habían ayudado a parar el 1-O sino que ayudaron que se pudiera celebrar. Desde entonces, los interrogatorios de Melero han insistido en acumular desmentidos sobre las palabras del coronel.
Ferran López fue el hombre que se encargó de la dirección de los Mossos cuando el 155 barrió el Govern y la cúpula policial, el comisario que durante los meses de suspensión del autogobierno se dejó ver en actos con el Rey y con el mismo juez Pablo Llarena. Hoy mismo, no ha tenido inconveniente en insistir en que tanto el major Josep Lluís Trapero como él habían advertido al president, Carles Puigdemont, y al vicepresident, Oriol Junqueras, de los riesgos que podían comportar seguir adelante con el referéndum y que les había conminado a acatar las órdenes judiciales.
Ante el tribunal, López también ha asegurado que el mecanismo conjunto quebró el mismo 1-O, que fueron conscientes al ver las imágenes por televisión y que tuvo la confirmación después de la reunión de coordinación que mantuvieron a media mañana.
En relación a las acusaciones que De los Cobos ha lanzado repetidamente contra la cúpula de los Mossos, ha asegurado que no escuchó ningún reproche ni ninguna recriminación del coronel de la Guardia Civil ni el 1-O ni el día siguiente, pero tampoco durante los meses posteriores en los que este figuraba como uno de los máximos responsables del ministerio del cual dependía la policía catalana.
De hecho, no hablaron más de lo que había ocurrido aquel día. Sólo hubo una excepción, ha explicado el comisario. Después de escuchar las declaraciones de De los Cobos en la Audiencia Nacional sobre qué pasó el 1-O, López pidió reunirse antes de declarar tanto con el coronel de la Guardia Civil como con el entonces secretario de Seguridad del ministerio, José Antonio Nieto, el objetivo no era ni pedir explicaciones ni plantear reproches, sólo advertirles de que en la Audiencia relataría bajo juramento su visión de los hechos, contradictoria con la que se había expuesto. "Cada uno explica su realidad como la vivió, y la mía es esta", argumentó.
Al acabar el interrogatorio, Melero ha reclamado aplicar el artículo 729 para practicar un careo de López y De los Cobos y con citación testifical del comandante de la Guardia Civil responsable de los registros en Economia el 20-S.
El presidente de sala, Manuel Marchena, le ha pedido las razones por las cuales reclama el careo y en qué puntos del artículo 729 se basa. Melero ha explicado que se ha acogido al tercer párrafo o por la vía del segundo. "O incluso del primero", ha ironizado Marchena provocando sonrisas en la sala después de la tensión de la declaración del comisario. Por la tarde, al retomar la sesión, el tribunal ha anunciado que posponía la decisión hasta que se haya visto todos el material probatorio, mientras que Melero ha aceptado la espera y ha retirado la petición de citación testifical.