El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha considerado que el hecho de que el partido de extrema derecha Vox sea acusación popular en el juicio al procés es "una anomalía del sistema".
Como consecuencia, el ministro ha expresado que "hay que reflexionar de manera urgente la temática de la acusación popular" y, de poder ser, se tiene que reformar y "si puede ser la próxima legislatura". Grande-Marlaska ha realizado estas declaraciones en El Món a RAC1, donde ha justificado esta adjudicación a que España "tiene todavía una democracia joven y al principio todavía había desconfianza en las instituciones del Estado".
Sobre el juicio, Marlaska ha opinado que "se está desarrollando con la normalidad propia" y no se ha querido pronunciar sobre los delitos de rebelión o sedición. "Sería temerario por mi parte", ha explicado Grande-Marlaska. "Yo he visto dos imágenes de televisión y eso puede no ser representativo y una imagen puede distorsionarlo", ha justificado. Desde un punto de vista personal y como ciudadano ha asegurado que tiene un punto de vista concreto pero "sería una irresponsabilidad posicionarme como ministro", ha concluido.
Cargas policiales
Tampoco se ha mojado sobre si el 1 de octubre hubo cargas policiales. El ministro del Interior ha preferido hablar "de actuación policial" porque al concepto de cargas "se añade implícitamente el término desproporcional". Grande-Marlaska ha apuntado que "puede haber cargas necesarias y proporcionales para mantener el orden público" y que estas "no siempre se tienen que entender como una cosa desproporcionada y sin sentido".
Sí que ha asegurado, firmemente, que a diferencia del exministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, él asume cualquier actuación de las fuerzas de seguridad del Estado. "No sé cómo él (en referencia a Zoido) dirigía el Ministerio del Interior. Yo sé cómo lo hago yo y sé que asumiría mis responsabilidades", ha sentenciado Marlaska.
Por último, Grande-Marlaska ha apuntado que "será el tribunal quien determinará si hubo cargas policiales" y no se ha avenido a la posibilidad de revisar la prisión preventiva. Según el Ministerio del Interior la prisión preventiva es una de las instituciones más estudiadas y valoradas, y los parámetros por los cuales se aplica están totalmente establecidos.
Auge de la ultraderecha y límites de la libertad de expresión
A Grande-Marlaska le preocupa el auge de la extrema derecha en el Estado español, pero ha sido crítico con la sociedad que lo permite. "Es preocupante el auge de VOX pero tenemos que aceptar que el hecho que tenga una base electoral tan grande es porque parte de la sociedad ha asumido su discurso", ha afirmado. Uno de los motivos que les facilitan el crecimiento es la crisis de Catalunya, ha apuntado, pero también "la crisis económica, la inmigración y la corrupción política."
El ministro también ha hablado de los límites de la libertad de expresión. "Estamos a las líneas rojas y solo se puede limitar si conduce a la violencia contra determinados colectivos", ha afirmado. Por eso, ha argumentado, es difícil calificar si el bus de Hazte Oír o entrar lazos amarillos en estadios de fútbol son acciones que traspasan estas líneas. "Los lazos amarillos en un campo de fútbol es libertad de expresión. Pero también se tienen que conjugar otros factores. En espectáculos públicos puede haber un problema de orden público porque se pueden caldear los ánimos", ha concluido.