Hace no muchos años, en la década de los 90, el diario madrileño ABC tenía un formato más pequeño que el actual —las malas lenguas decían que era el tamaño perfecto para que los funcionarios lo escondieran entre sus papeles para hojearlo en horas de trabajo— y era mucho más grueso, entre otros motivos porque las primeras páginas estaban dedicadas a las fotografías porque dentro no había ninguna. Lo que sí que había en páginas interiores eran dibujos, en una sola tinta, que normalmente eran retratos de las personalidades destacadas. En el argot periodístico se conocían como cabecitas, y que el ABC reprodujera la cara de un político, un artista o un deportista daba la medida de la importancia del personaje en cuestión. Si no tenías cabecita en el ABC, es que no eras nadie.

El caso es que este martes, día de inicio del proceso, dos portadas de diarios editados en Madrid —y no precisamente el ABC— han traído a la memoria aquellas cabecitas, porque han escogido dibujos para mostrar las caras de los procesados. Lo que pasa es que más bien se trata de caricaturas, lo cual lleva a pensar si el recurso gráfico utilizado no es más que una herramienta más al servicio de una manera de interpretar el juicio al procés que no ha creído nunca en la presunción de inocencia y que ya tiene la sentencia prácticamente en rotativas.

Los titulares que acompañan, evidentemente, tampoco son inocentes: El Mundo abre con una retahíla de cabecitas caricaturizadas de los doce procesados —en la edición on-line añade la de Puigdemont— con el título: "El Supremo enjuicia el golpe del 1-O en plena tormenta política". Juez y parte, este diario ya da por hecho que el 1 de octubre del 2017 hubo un golpe de estado, lo cual no augura que desde este rotativo confien en otro tipo de sentencia que no sea condenatoria.

La Razón también se apunta a las caricaturas, que forman un cuadrado que rodea el título "Sánchez marca el juicio en clave electoral", una interpretación política que para algún despistado podría llegar a parecer neutra. Por si hay alguna duda del posicionamiento en casa de Marhuenda, atención al antetítulo: "Arranca el proceso contra el golpe del 1-O", y sobre todo, al editorial, extractada en portada: "Un golpe a la democracia, ante la justicia".

Con respecto al ABC, casi siempre en su mundo, prefiere dedicar su portada monotemática a las tribulaciones del presidente del Gobierno con un "Sánchez se queda sin excusas" y casi sin alusiones al inicio del juicio.

Finalmente, El País opta por un titular más aseado: "Doce dirigentes del 'procés' secesionista, ante el Supremo", que al menos tiene la virtud de no tomar posición. Ni utilizar caricaturas.