"Se concentraban grupos muy numerosos de personas. Yo llegué a contar más de 100 o 150 acciones diferentes en diferentes municipios delante de diferentes edificios públicos, cuarteles de la Guardia Civil, con lanzamiento de objetos, incluso objetos incendiarios",
Enric Millo, exdelegado del Gobierno, primero testigo en declarar hoy, ha llevado su relato hasta la violencia: "Se generó un clima que en el día a día, allí donde había una acción policial, aparecía un grupo de personas para asediar, amenazar y agredir directamente a vehículos y personas".
No se puede negar que algunos CDR son violentos
"Era el mundo al revés. La policía actuaba por orden del juez o el fiscal y en cambio el llamamiento que se hacía desde las asociaciones públicas decía 'salimos a defender a nuestras instituciones'. Denota que alguien las estaba atacando. Era el mundo al revés", ha reiterado Millo para explicar que se puso en peligro "el orden constitucional en Catalunya".
Enric Millo, testigo de la fiscalía, ha avalado la violencia necesaria que necesitan las acusaciones para mantener el delito de rebelión. Su testigo junto con el del que fue secretario de Estado de seguridad, José Antonio Nieto, que declaró ayer, son los primeros y principales puntos de apoyo del ministerio público para convertir unos disturbios, los daños en unos coches y la acción de los CDR en violencia y alzamiento tumultuario.
"Había grupos que se manifestaban pacíficamente y otros violentos. Porque tirar objetos incendiarios es violencia. Llegaron a pintar 'Millo muerte'", ha dicho encendiendo el relato de la violencia.
Los CDR
"Era impresionado la capacidad de movilización. Este fenómeno es un fenómeno nuevo de los CDR. Aparentemente son células autónomas que funcionan de manera espontánea, pero un estudio detallado de su funcionamiento y un análisis de cómo evolucionan permiten deducir que detrás hay una estructura y organización y de espontáneo tiene poco".
Millo ha querido centrar el debate de la violencia responsabilizando los CDR: "Hemos podido comprobar que dentro hay personas que tienen otros objetivos y que no tienen ningún problema al utilizar la violencia". Y después ha señalado la ANC y Òmnium: "Òmnium se ha ido transformando claramente en un instrumento político".
Pero a preguntas de la abogada del Estado ha dicho que "aunque la relación es evidente que existe, no lo puedo demostrar".
La violencia policial
Millo ha seguido la línea de sus superiores en España y del secretario de Estado de seguridad diciendo que la violencia policial se hubiera podido evitar si no se hubiera convocado el referéndum y sin asumir ningún tipo de responsabilidad sobre las cargas desproporcionadas.
La gente estaba movida por un engaño. Les hacían creer que todo era legal y que se podía hacer
"Al mediodía volví a hablar con Forn. Una conversación subida de tono donde me exigía que detuviera las actuaciones policiales", ha relatado. "Le dije a Forn que la manera de pararlo era desconvocar el referéndum", ha dicho durante la declaración, añadiendo que también hubo imágenes de personas agrediendo a la policía.
"A partir del 2 de octubre estuve visitando a los policías en los barcos", ha seguido. "Tenía mucho interés en saber cómo los policías habían vivido aquella jornada. Los testigos de los policías hacían poner los pelos de punta".
"La declaración de independencia no era simbólica. Eso no era uno broma. Eso iba en serio", ha rubricado Enric Millo dando a entender que se proclamó la DUI.
El 1-O
"Los Mossos pedían que se marchara la policía española porque decían que ya tenían lo suficiente con su cuerpo para hacer cumplir el auto", ha explicado Millo mientras ha denunciado las convocatorias de escuelas abiertas para proteger los colegios.
"Aparentemente decían que organizaban actividades lúdicas para ocupar los centros electorales", ha afirmado.
De la Junta de Seguridad ha dicho que fue un "esperpento". Millo ha dicho que el Govern les explicó que habría un referéndum y que "a ver cómo nos ponían de acuerdo para garantizar la seguridad". El exdelegado del Gobierno en Catalunya ha calificado la reunión de "tensa" porque entre otras cosas Puigdemont se acogió a un párrafo de la orden judicial que afirmaba que "tenía que garantizar la normal convivencia cívica en Catalunya".
Dije que el único responsable de la violencia era Puigdemont. En su nombre pedí disculpas
Según Millo, el Mayor Josep Lluís Trapero decía que tenía que dar cumplimiento al mandato judicial, pero no explicó cómo, solo remarcó que sería sin hacer uso de la violencia.
Y ha justificado la violencia de la policía española: "Había clima de crispación y un ánimo que sugería que el 1-O sería un riesgo para la integridad física de las personas".
También se ha desmarcado del mismo dispositivo y del equipo que coordinó a la policía española. Solo se ha vinculado para explicar que se mantuvo en contacto "verbal" con el secretario de Estado de Seguridad.
Millo tilda de suicida a Puigdemont
Enric Millo, el que fue el delegado del Gobierno, ha explicado las reuniones que tuvo con Carles Puigdemont mostrándolo como una persona obsesionada por conseguir la independencia y hacer el referéndum.
"Su respuesta siempre era la misma. Nada tenía interés si no era conseguir el visto bueno para hacer un referéndum. En el otro lado de la mesa me encontré una silla vacía. No había respuesta a nada si no era permitir un acto ilegal. Era un planteamiento suicida", ha expuesto Millo a preguntas de la fiscalía.
Millo ha explicado cómo en una de los últimas conversaciones, Carles Puigdemont le dijo: "Yo ya no puedo dar marcha atrás. Estoy comprometido con eso. Yo voy a convocar el referéndum y después seguimos hablando". Tres días más tarde Puigdemont convoca el referéndum anunciando la fecha y la pregunta. "Aquel día se puso punto y final" ha afirmado Millo.
"Le trasladé mi voluntad que eso no acabara mal con un enfrentamiento con el estado", ha explicado Millo sobre una de las reuniones con Carles Puigdemont.
"Mi interés era persuadirlo que mantener la hoja de ruta que desafiaba al TC, incumplir la legalidad vigente, era un muy mal camino, que su obligación era de cumplir con la ley y que el representante del Estado en Catalunya no lo podía hacer. Su posición siempre fue la misma. No había ningún tema que le interesara mucho hablar, aunque yo le propusiera otros temas".
Junqueras era absolutamente partidario del referéndum
Millo también ha explicado la única reunión que tuvo con el vicepresidente, Oriol Junqueras.
"Me encontré con Junqueras. Me confesó que él quería que las cosas fueran más poco a poco. Pero que tenían un compromiso".
"Junqueras me dijo que él no necesitaba demostrar que era independentista y que algunos miembros del Govern tenían más trabajo para probar que lo eran", ha afirmado Millo refiriéndose al bloque de Convergència o PDeCAT que formaba el Govern de Junts pel Sí.
Y en esta línea, Millo ha afirmado: "El verano de 2017 Puigdemont planteó a los miembros de su Govern que quien no quisiera llegar al final podía abandonar".
Millo, Forn y los Mossos
"Me preocupó mucho la dimisión del conseller de Interior Jané", ha dicho Millo, que ha explicado la primera reunión que mantuvo con Joaquim Forn una vez nombrado conseller.
El que fue delegado del Gobierno en Catalunya ha explicado que Forn era partidario de la colaboración entre cuerpos policiales. Forn también mostró la voluntad de respetar los acuerdos de la última reunión de la Junta de Seguridad.
Pero donde Millo queda "estupefacto", según ha relatado él mismo, es cuando le pregunta a Forn sobre el referéndum y le responde: "Aquel día nosotros garantizaremos que la jornada electoral se desarrolle con total normalidad".
Millo y los alcaldes
Enric Millo no ha querido apuntar directamente a los alcaldes ni a la colaboración que se pidió desde el Govern, pero sí que ha dicho que él envió una carta a los ayuntamientos recordando que el referéndum estaba suspendido por el Tribunal Constitucional.
"Envío una carta a todos los alcaldes, otra a todos los directores de los centros educativos de Catalunya recordando cuáles eran sus obligaciones de no ceder locales y de impedir el referéndum", ha relatado Millo.
Con el artículo 155 se reanudó la orden
Enric Millo ha explicado que es a partir del 8 de septiembre cuando la fiscalía empieza a dar las instrucciones. El 20 de septiembre "hubo hechos muy destacables que tenían como objetivo intimidar o impedir la acción judicial", ha afirmado Millo.
Enric Millo es el primero del día en declarar y el primero en protagonizar la anécdota del día. El fiscal ha pedido que no saliera su imagen por la tele. Las defensas se han opuesto. Y el mismo Millo ha afirmado que no tenía inconveniente en salir públicamente, lo que ha provocado caras de paradoja de todo el mundo, sobre todo del fiscal Javier Zaragoza, que había pedido la medida, en principio en connivencia con el testigo.