Eulàlia Reguant no ha querido declarar ni en catalán ni responder a las preguntas de Vox, y Manuel Marchena, con la reciente experiencia de Antonio Baños, directamente la ha echado.
La había citado la acusación popular, por lo tanto, sin responder a Vox, no hay declaración. Y Marchena no ha querido hacer el papelote como acababa de hacer con Baños. Y más si eso representaba crear un precedente. Por lo tanto, la declaración de Reguant ha sido la más fugaz.