Daniel Baena ha negado que estuviera detrás del perfil de Twitter 'Tácito': "Ha sido desmentido en prensa, en el Congreso, en el Senado...".
Pero el abogado de Junqueras y Romeva, Andreu Van den Eynde, le ha preguntado directamente si es él y si publicó en su perfil de Facebook y en el de Instagram la misma foto de Tácito. Pero Daniel Baena ha dicho que no recordaba haber publicado la foto de la serpiente de cascabel enroscada.
La cuenta se dedicaba a cargar contra políticos que él mismo investigaba en las causas abiertas contra el 1 de octubre y donde también cuestiona a periodistas y Mossos.
Así ha empezado el interrogatorio de las defensas a quien fue el relator de la investigación contra el procés.
La sedición antes de la sedición
"Este término lo empezamos a utilizar antes del 20-S, antes de los indicios de sedición", ha dicho Daniel Baena y ha justificado que el fiscal "abre la puerta para investigar". Aunque la investigación estaba centrada en el delito de la malversación, el teniente coronel admite que se investiga la sedición desde el 2016.
Aunque el teniente coronel se ha apresurado a dejar claro: "No investiguemos a partir de declaraciones políticas". "A mí el juez nunca me ordenó investigar el procés", ha respondido contundente a preguntas de Andreu Van den Eynde.
Investigamos conductas de personas que hacen cosas
"No estábamos investigando ni a la ANC ni Òmnium, investigamos personas", ha dicho el jefe de la investigación de la Guardia Civil que puso la base de la denuncia por sedición y la querella contra Jordi Sànchez y Jordi Cuixart. "Investigamos conductas de personas que hacen cosas, no entidades que hacen cosas", ha insistido.
De todo el análisis de correos y llamadas, sin embargo, no se desprende en ninguna conversación de que hubiera ninguna incitación a la violencia. Lo ha dicho el mismo Daniel Baena, que también ha admitido que a nivel personal sí que puede corroborar que en las conversaciones se hablaba siempre de movimientos pacíficos.
También ha admitido que pidieron balizar un coche para hacer el seguimiento, pero que el juez no lo autorizó.