El presidente del Tribunal Supremo Manuel Marchena ha abierto la sesión, la tercera del juicio al procés, resolviendo las cuestiones previas.
Algunas de las alegaciones sobre derechos fundamentales se resolverán en sentencia extensamente, pero ahora se ha dado respuesta a las que afectan directamente al desarrollo del juicio como la lengua que utilizarán los acusados y abogados.
El tribunal no acepta la traducción simultánea porque no todos tienen auriculares para todos, según ha explicado Marchena. Tampoco permite a los abogados preguntar en catalán. Y para negarlo Marchena se ha referido a las directrices del Consejo de Europa que "no otorga derechos individuales ni colectivos a los que hablan una lengua minoritaria".
Lo que sí permitirá el tribunal son respuestas en catalán de los acusados si así ellos lo creen necesario para expresarse mejor. De hecho, por eso hay dos traductores en la sala para intervenir cuando haga falta.
Marchena ha concretado que "los acusados podrán responder en catalán" y ha explicado que "la sala reconoce las razones de carácter emocional si optan por responder en catalán para evitar la indefensión si responden en castellano".
También ha recordado al presidente del tribunal que "llevamos un año y 4 meses y no se ha hecho la más mínima alusión a la posibilidad de responder con la lengua catalana".
Donde sentarse
El tribunal también ha aceptado que los acusados se puedan sentar detrás de sus abogados una vez ya hayan declarado para poder consultar documentación. Lo que sí no dejará es mover papeles por la sala entre abogados y los procesados que se mantengan en el banquillo de los acusados.
La petición de Andreu Van den Eynde, abogado de Junqueras y Romeva que apeló a la justicia más moderna d'europa, que actualmente mantiene a los acusados al lado de sus abogados durante el juicio.
Está por ver a qué acusados cambiarán de lugar y si lo harán. Si se colocan detrás de sus abogados se perderá la imagen de los acusados ante el tribunal y, de hecho, se perderá la imagen de los acusados si acaban en la fila del detrás de las defensas.
Nuevas pruebas
El tribunal ha admitido nuevas pruebas. Entre ellas, imágenes de las cargas policiales del 1-O.
También se acuerda incorporar nuevos informes económicos sobre el gasto del referéndum que pidió la defensa de Dolors Bassa.
El abogado de Joaquim Forn pidió la incorporación de peritos de Scotland Yard sobre los dispositivos policiales y el tratamiento de manifestaciones masivas, però la Sala Segunda no lo ha aceptado porque se presenta para contrarrestar un informe de inteligencia de la fiscalía que también se ha denegado.
Manuel Marchena ha remarcado que no se aceptará ninguna prueba de valoración ni de inteligencia, sino sobre los hechos.
Nuevos testigos
Si que se acepta la declaración del exministro Juan Ignacio Zoido que pidió el lunes el abogado de Joaquim Forn, Xavier Melero.