Juli Fernàndez (Sabadell, 1977) no fue escogido diputado el 12 de mayo. Iba de número 13 en las listas por Barcelona donde Esquerra Republicana consiguió 12 diputados, pero la renuncia del president Pere Aragonès hizo correr la lista y él era el siguiente. El exalcalde de Sabadell y exconseller de Territori (cargo que solo ocupó unos cuantos meses) no solo volvió a ser diputado, sino que también asumió la secretaría segunda de la cámara catalana después de un pacto de los partidos independentistas que hizo president a Josep Rull. Además, es secretario general adjunto de ERC y miembro de su equipo negociador que coordina desde el exilio la secretaria general y ahora número uno del partido, Marta Rovira, para la investidura del próximo presidente de la Generalitat. Fernàndez responde a las preguntas de ElNacional.cat en el Parlament, en una semana marcada en ERC por la publicación de un manifiesto que ya han firmado cerca de 900 militantes reclamando la renovación de la cúpula. Este hecho que se ha entendido como un mensaje para el ya expresidente Oriol Junqueras, que tiene la intención de presentarse en el congreso del 30 de noviembre para revalidar el cargo, Fernàndez es uno de los miembros de la ejecutiva que ha optado por no dar apoyo a este texto.
Josep Rull ha decidido que no habrá un pleno de investidura sin candidato. Ustedes lo han ido criticando esta semana. ¿Cuál de los dos candidatos se tendría que haber presentado?
Más que criticar, lo que creemos es que si hay dos candidatos que durante toda la campaña electoral han ido diciendo que quieren liderar y presidir este país, creemos que es importante para la ciudadanía y también para el Parlament de Catalunya, para los diputados y diputadas, que en un pleno de investidura solemne expliquen cuáles son sus propuestas para el país que quieren liderar, qué es lo que quieren hacer, cuál es su proyecto para el país y para la gente. Nosotros, como hicimos ya hace un poco más de tres años, cuando teníamos la responsabilidad y la voluntad de liderar el país, fuimos al Parlament de Catalunya, habiendo trabajado previamente para poder llegar a acuerdos, a explicarnos, intentar convencer a los diputados y diputadas en una sesión plenaria, pero también a explicarle al país cuál era el proyecto republicano para Catalunya. Y por eso creemos que es importante que quien quiera liderar este país no diga que quiere más tiempo, sino que cumpla con aquello que dijo y explique a la ciudadanía cuál es su propuesta.
No nos gustaría pensar que el PSC o Junts están jugando o especulando con nuevas elecciones
¿Por qué cree que no han querido dar este paso?
A nosotros lo que nos gustaría es que expliquen su propuesta, que contrasten el proyecto de país, porque es importante saber el qué y el porqué. Los motivos los explicarán seguro que mucho mejor ellos porque yo los desconozco. Lo que a nosotros no nos gustaría es pensar que están jugando o especulando con nuevas elecciones. Creemos que las elecciones nos han dado unos resultados que a nosotros no nos gustan, preferiríamos que fueran otros y ahora aquellos que tienen la responsabilidad de liderar esta situación y que llegaron a partir de una oposición al Govern republicano que en ningún caso era constructiva, como vimos en el Parlament pleno tras pleno, que asuman su responsabilidad. Es sencillo. Tenemos también un reglamento del Parlament que, si bien es verdad que hemos llegado a una situación donde ninguno de los dos expresaba su voluntad, esto hasta ahora no había pasado nunca. Aquellos que quieren sacar adelante el país, lo que no tendrían que hacer es esconderse, si no ir al Parlament de Catalunya a construir o intentar tejer alianzas y explicar sus propuestas.
Los resultados de su partido fueron especialmente malos. ¿En este mes y medio que ha pasado ya han podido hacer una reflexión para identificar qué los ha llevado a sacar este mal resultado?
Desde el primer día hemos tenido la capacidad de leer los resultados y de asumirlos, por ejemplo con la renuncia del president de la Generalitat y del presidente del partido, abriendo una etapa donde tenemos un porceso de escucha con la militancia y con el congreso nacional situado el 30 de noviembre. Hemos leído y asumido nuestras responsabilidades y las compartimos diariamente con el objetivo de ser la herramienta útil que necesita el país para que se alcance la independencia. Es decir, nosotros, Esquerra Republicana de Catalunya, somos la mejor herramienta política al servicio del bienestar y la prosperidad de la gente y de la independencia de este país. Y es por eso que nosotros trabajamos cada día y es eso lo que hará que trabajemos para tener la mejor herramienta y las más preparada a partir del 30 de noviembre. Y aquí es donde estamos.
Durante estas últimas semanas las exigencias del partido sobre la financiación singular han quedado muy claras, pero también han dicho que con eso no es suficiente y que se tiene que avanzar en el referéndum o en cuestiones como la lengua catalana. ¿Si Illa quiere sus votos, como tendrá que avanzar hacia la autodeterminación?
Yo creo que hemos sido muy claros. Lo que hace falta es avanzar en el conflicto político entre Catalunya y España, en la resolución de este conflicto político y eso es avanzar en el referéndum, en el ejercicio del derecho de autodeterminación del país. La financiación singular, la soberanía fiscal, el concierto económico, tener la llave de la caja, que al final lo que hace es que los ciudadanos y ciudadanas de Catalunya puedan tener todos los recursos que generan para tener mejores servicios, mejores hospitales, mejores escuelas, mejor transporte público... Y aquí me gustaría ser muy claro: no valen juegos de palabras: estamos hablando de un concierto económico, de recaudar todos los impuestos, de gestionarlos y de decidir sobre los recursos que generamos con el fin de que la gente viva mejor. No hay subterfugios posibes. Y, además, el país necesita fortalecerse nacionalmente, y aquí la lengua es primordial, es clave, es una herramienta de compartir, de encuentro y común entre todos los ciudadanos y ciudadanas de Catalunya. Una herramienta en la acogida de gente diversa que hay en nuestro país y como herramienta de lucha ante aquel populismo antimigratorio de extrema derecha en el país, porque nosotros creemos que la Catalunya pura es la peor enemiga de la Catalunya libre.
La Catalunya pura es la peor enemiga de la Catalunya libre
Durante la campaña, el president Aragonès puso sobre la mesa crear una conselleria específica para la lengua catalana. ¿Esta puede ser una exigencia a la hora de negociar con otros partidos?
Esta propuesta se hizo porque creemos que era buena en la situación en que se encuentra la lengua a día de hoy, que tuviera todos los mecanismos que tiene una conselleria para poner en el centro la lengua, y por lo tanto es una propuesta en la que creemos. A partir de aquí, yo he explicado cuáles son nuestros ejes en los que estamos entrando y poniendo sobre la mesa y estamos esperando propuestas en este sentido.
Aragonès dijo que ERC tenía que pasar a la oposición y que era responsabilidad de Junts y PSC llegar a un acuerdo. Ahora negocian con los dos partidos. ¿Qué ha cambiado desde el día de las elecciones?
Lo que tenemos claro es lo que los resultados de las urnas nos han dicho: nosotros no hemos ganado las elecciones y que quien tuvo más apoyos que nosotros fueron aquellos que estaban en la oposición del gobierno republicano, tanto el PSC como Junts per Catalunya. Por ello entendemos que la responsabilidad principal en el liderazgo de las opciones que pueda haber en este país les corresponde a ellos y por eso tendrían que ir a una investidura. Ahora bien, somos Esquerra Republicana de Catalunya, con 20 diputados. Somos gente que nos gusta negociar, que nos gusta hacer política. Tenemos estos cuatro elementos principales: conflicto político; financiación, concierto y soberanía fiscal; modelo socioeconómico y catalán. A partir de aquí, se trata de intentar ver cuáles son las posiciones de las otras formaciones y si hay posibilidad de entrar en estas negociaciones e ir más allá. ERC no dimite de hacer que el país viva mejor, nosotros, si tenemos la oportunidad, lo hacemos.
La CUP dice que Puigdemont fantasea con la abstención de Illa. ¿Creéis que esta es posible?
Lo que queremos es que el president Puigdemont nos explique qué quiere hacer para el país y cómo piensa construir las mayorías. A partir de aquí nosotros estamos abiertos a hacer exploraciones de negociaciones, pero es importante que nos explique cómo piensa hacer las mayorías, donde es evidente que hace falta la intervención del PSC, y qué pretende hacer con el país.
El PSC ya se ha negado en rotundo a la abstención. ¿Tiene sentido entonces negociar con Junts?
En todo caso, son ellos quienes nos tienen que explicar si tienen o no tienen este escenario de posibilidad. Junts per Catalunya debe explicar cómo piensa construir una hipotética mayoría y es evidente que es esta es su responsabilidad, no la de ERC.
Junts per Catalunya tiene la responsabilidad de explicar cómo piensa construir una hipotética mayoría y es evidente que es su responsabilidad, no de ERC
Existe la posibilidad de una repetición electoral en Catalunya. ¿Cree que ERC saldría perjudicada o los independentistas que los han dejado de votar valorarían que no se haya llegado a un pacto con el PSC?
Tendríamos que estar hablando de cuáles son los proyectos para que este país vaya adelante y para que haya un Govern, no que se esté especulando en cómo se irá a unas próximas elecciones. Y nosotros estamos aquí. Si hay elecciones, Esquerra está preparada para presentarse. Pero creemos que para el país lo mejor es que haya una situación donde nos centramos en cuáles son los proyectos, en qué quiere hacer cada uno. Nosotros hemos explicado qué queremos para el país, lo hemos dejado claro, y por lo tanto si llegamos a una situación en la que aquello que nosotros creemos que es bueno para el país no se plantea ni resuelve y llegamos a una convocatoria electoral, nosotros participaremos de ella, explicaremos qué queremos para el país, que es avanzar en la independencia y en el bienestar y prosperidad de la gente y hacerlo en los términos en los cuales estamos situando esta negociación como pasos necesarios para llegar.
¿El mejor escenario sería que fueran investidos Illa o Puigdemont?
El mejor escenario, ahora mismo, es que expliquen cuáles son los proyectos que tienen para este país estas personas y estas formaciones políticas que tienen la responsabilidad de liderar este país, o que dicen querer liderarlo, y esto no está pasando.
Marta Rovira ha dicho que ella tiene en mente el nombre del candidato de una posible repetición electoral. ¿Usted tiene alguno?
Lo decía porque este es uno de sus trabajos como secretaria general. Y nosotros, evidentemente, pensamos en diferentes escenarios, en diferentes propuestas y después lo compartimos con nuestras partes de la organización y con los y las militantes.
Ahora mismo el foco no tendría que estar en unas elecciones hipotéticas que no se sabe si habrá o no habrá. Aquellos que tienen la responsabilidad de liderar el país están hablando de eso en lugar de cómo lo harán
¿Entonces no tiene ninguno?
O tengo muchos. En el partido hay muchísima gente que puede ser una muy buena candidata. Nosotros no nos queremos situar en el escenario de unas nuevas elecciones. Ha habido unas elecciones hace poco más de un mes, ha habido unos partidos que querían ganar estas elecciones y que querían tener la presidencia de la Generalitat. Pues vamos a ello. En todo caso, si hay un hipotético escenario electoral, Esquerra Republicana de Catalunya hará de Esquerra Republicana de Catalunya. Ahora mismo el foco no tiene que estar en unas elecciones hipotéticas que no se sabe si habrá o no habrá. Aquellos que tienen la responsabilidad de liderar el país están hablando de eso en lugar de cómo lo harán. Cuando la responsabilidad fue nuestra, no tuvimos ninguna duda, nos pusimos a trabjar, nos arremangamos, vinimos al Parlament de Catalunya, hicimos una investidura, no tuvimos los apoyos y acabamos teniendo la presidencia de la Generalitat. Pues tanto el señor Salvador Illa como el señor Carles Puigdemont deben explicarnos cómo pretenden construir las mayorías y qué quieren hacer y a partir de aquí intentaremos ver si podemos construir acuerdos o no. No podemos estar tres pantallas más allá.
¿A qué modelo se parece más el de ERC, al de Junts o al del PSC?
ERC es un partido que pone cuáles son sus condiciones. Las trabajaremos con unos y otros y veremos si hay puntos de coincidencia.
Este lunes se hizo público un manifiesto que ya han firmado más de 800 militantes, pero usted no figura en esta lista. ¿No está de acuerdo con lo que en él se dice?
Yo tengo los espacios donde explicar mi opinión internamente en el partido como todos los y las militantes, y es lo que he hecho siempre. No solo ahora, siempre, en diferentes circunstancias políticas que me ha tocado vivir, y es lo que seguiré haciendo. Mi objetivo es que el partido, como he dicho antes, el 30 de noviembre siga siendo una herramienta útil, la mejor herramienta, la más fuerte posible, para avanzar en nuestros objetivos fundacionales que es el progreso social, el bienestar de la gente, la prosperidad y la independencia de este país. Entiendo a todo el mundo que lo hace de una manera o de otra, pero yo personalmente no tengo esta necesidad.
Yo tengo los espacios donde explicar mi opinión internamente en el partido como todos los militantes y las militantes. Entiendo a todo el mundo que lo hace de una manera o de otra, pero yo personalmente no tengo esta necesidad
No sé si cree como persona que se encarga de negociar en nombre de Esquerra, que el hecho de que se haya publicado este manifiesto en plenas negociaciones los puede debilitar a la hora de hablar con otros partidos.
Los temas de la negociación de ERC son muy claros, avanzar para la resolución del conflicto político con la financiación singular, soberanía fiscal, el modelo socioeconómico y el catalán y estos son marcos compartidos y que, por lo tanto, son las bases de nuestra negociación. Tenemos muy claro en qué situación vive el país y también que es la gente que ha tenido más apoyos quien tiene que asumir sus responsabilidades. Y en todo caso, el partido ha establecido sus mecanismos, el 30 de noviembre tenemos congreso y seguro que tendremos una herramienta mejor, más fuerte y más útil en el contexto en que vivimos actualmente.
¿Pero teme que este manifiesto pueda debilitar la posición negociadora de Esquerra?
Como aquello que hace que entremos en la negociación es un marco muy claro y fijado de ERC, tenemos toda la capacidad y fuerza negociadora en este sentido.
Este manifiesto se ha leído como una reclamación a Oriol Junqueras para que abandone la presidencia del partido. ¿Cree que sería un error?
Yo mis opiniones del partido, de ERC, las comparto en los espacios internos de mi organización. Lo que yo estoy convencido y que es seguro y sé que compartimos todos es que tenemos que estar todos, tenemos que ser más fuertes, tenemos que ser tan útiles como podamos y tenemos que ser más.