"Una vez más se demuestra que los partidos políticos que son incapaces de ganar elecciones en Catalunya utilizan a sus amigos en los órganos represivos del Estado para intentar imponer su voluntad individual a la democracia y al conjunto de la sociedad. Un ejemplo más de cómo se intenta violentar la democracia". Con estas palabras ha iniciado su discurso el presidente de ERC, Oriol Junqueras, en las puertas de la Ciutat de la Justícia, donde ha ido a dar apoyo al exconseller Raül Romeva y quien fue el secretario general de Exteriores, Aleix Villatoro, que esta mañana declaran en el juzgado de instrucción número 18 de Barcelona. Están siendo investigados por supuestos delitos de prevaricación, malversación y falsedad documental por la acción exterior del Govern en el marco del procés.
En las puertas de la ciudad de la justicia, aparte de otros dirigentes de ERC como Marta Vilalta, han asistido también los diputados de Junts Pere Albó y Titón Laïlla, las diputadas de la CUP Eulàlia Reguant y Dolors Sabater, de Òmnium ha asistido Jordi Cuixart y Xavier Antich mientras que de la ANC ha hecho presencia la secretaria nacional Mònica Batalla. Quien no ha acompañado a Romeva ha sido Junts, mientras que sí apoyaron hace dos días al diputado de la CUP Pau Juvillà delante del TSJC, cuando fue citado por no haber retirado los lazos amarillos de la Paeria en apoyo a los presos políticos.
Junqueras ha lamentado que una vez más se utilice la represión para reprimir a las personas que "trabajan por el bienestar de la ciudadanía", y ha asegurado que hoy llevan ante un juez a un conseller y a un secretario general que trabajaron para traer inversiones extranjeras a Catalunya y generar puestos de trabajo: "Todo el mundo tiene que saber que la represión no impedirá que sigamos trabajando por la democracia y por los derechos del conjunto de la ciudadanía", ha declarado Junqueras, que ha reafirmado que la represión no los intimida y que sus prisiones no les dan miedo: "Estamos dispuestos a volver siempre que haga falta. Forma parte de nuestro camino colectivo hacia la libertad".
Por su parte, la anticapitalista Dolors Sabater ha trasladado su apoyo antirrepresivo a Romeva, pero ha aprovechado para cargar contra la estrategia de ERC de pactar con el Estado o bien facilitar la aprobación de sus presupuestos: "Desde nuestro espacio lo que reclamamos es no sostener un marco de estabilización del Estado, porque en este marco no caben nuestros derechos. Hacemos un llamamiento a reflexionar sobre cómo estabilizando el estado, no estamos avanzando".
El catalán en las escuelas
Ambos políticos han aprovechado sus intervenciones también para cargar contra la decisión del Tribunal Supremo que impone el castellano en las aulas. Para Junqueras también es un claro ejemplo de que los partidos utilizan los aparatos del Estado para imponer su modelo lingüístico a la mayoría de la sociedad catalana, por lo que ha llamado a partidos, entidades y sociedad civil a trabajar por la cohesión social. Por su parte, Sabater ha criticado que se quieran "cargar" la inmersión lingüística, un elemento de consenso imprescindible, ha destacado.