Minutos más tarde que el Congreso haya aprobado definitivamente la ley de amnistía, Oriol Junqueras ha comparecido ante los medios de comunicación para celebrar esta “victoria para Catalunya” y también para el conjunto de los demócratas, asegurando que esta norma no tiene que ser un punto final para el proceso independentista, sino un punto y seguido para continuar y volver a votar en un nuevo referéndum, que Gabriel Rufián ya ha apuntado desde el hemiciclo que tiene que ser la próxima parada. Preguntado por lo que vendrá a partir de ahora, el todavía presidente de Esquerra Republicana, que ha seguido el pleno desde la tribuna, acompañado de otros dirigentes del partido y también de Dolors Bassa y Carme Forcadell, ha celebrado que los primeros beneficiados serán “personas poco conocidas” que tendrán más fácil que se les aplique la ley, descartando que sea igual de sencillo para todo el mundo: “Es probable que algunos tribunales quieran poner muchos palos en las ruedas. Lo tenemos asumido”. La pelota, una vez la ley se publique en el BOE, estará en el tejado de los jueces y hay interrogantes abiertos sobre como actuarán.
Ninguna sorpresa con el PP
Preguntado por la decisión del PP de presentar recursos contra la ley aprobada este jueves, que ha anunciado Isabel Díaz Ayuso y no Alberto Núñez Feijóo, Junqueras ha asegurado que no hay ningún elemento sorprendente en esta decisión: “Es evidente que hay una gran coalición entre PP, Vox y una parte del poder judicial que hace muchos años decidió convertirse en una tercera cámara legislativa”, ha lamentado el republicano a su salida del Congreso. Sobre si la aprobación de la amnistía garantiza un periodo de estabilidad en el gobierno de Pedro Sánchez, Junqueras ha resuelto que lo asegura la estabilidad es tener un “compromiso con la democracia”. Siguiendo la línea de lo que ha ido expresando ERC en las últimas semanas, Junqueras ha atribuido a su partido la paternidad de la amnistía, recordando que la defendían ya años atrás, cuando los socialistas decían que “de ninguna manera” y otras partes del independentismo aseguraban que era un error hacerlo: “Nosotros estábamos seguros de que era el buen camino, que era la buena decisión. Celebramos que sean muchos más los que hoy se suman”.
Preguntado por la tregua en la tribuna del congreso entre ERC y Junts, ya que los dos partidos se han dedicado buenas palabras y durante unos minutos han enterrado el hacha de guerra, Junqueras ha querido quitar importancia, asegurando que “dirigir palabras amables siempre es bueno. Es bueno expresar nuestra estima a todo el mundo”, ha concluido. Rufián ha dedicado parte de su parlamento a agradecer el trabajo realizado a nombres concretos como el de Carles Puigdemont, Joan Tardà, Rovira o el mismo Junqueras, entre muchos otros. En el patio del Congreso, Junqueras —que ayer ya participó en un acto electoral en Madrid para las europeas del 9 de junio— Junqueras se ha saludado y abrazado con Jordi Turull y otros líderes de Junts.