La estrategia por el diálogo abrió el martes un nuevo pulso de tensión entre los dos partidos del Govern, ERC y Junts, por el anuncio sobre la reunión entre la consellera Laura Vilagrà y el ministro Félix Bolaños. La reactivación del diálogo, que en los últimos meses había estado en la sombra por el CatalanGate y por las elecciones andaluzas, se ha vuelto a situar en el tablero de juego una vez pasados los comicios donde el PSOE ha sufrido un buen batacazo, y ahora ERC vuelve a insistir en apuntalar esta estrategia. De la reunión de este miércoles entre los representantes del gobierno catalán y el español se espera que salgan nuevas informaciones o concreciones de esta mesa de diálogo que supuestamente se tenía que reunir "a principios de año", y los republicanos insisten en que esta es la vía para defender las ideas.
"Estamos tan convencidos de la bondad de nuestras ideas y de la razonabilidad en la defensa de estas, que estamos convencidos de que convenceremos a los otros, y no hay ningún riesgo de que nadie nos convenza a nosotros de aquello de que no queremos hacer", ha expresado el presidente de ERC Oriol Junqueras en el transcurso de un acto de los republicanos para recordar que el jueves hará un año de la concesión de los indultos a los presos políticos. Junqueras ha insistido, una vez más, que la negociación es útil para defender las ideas, y que saben que el Gobierno querría ahorrarse la mesa y que por eso siempre pone todo tipo de excusas: "El Gobierno querría ahorrarse esta mesa. Lo último que nosotros tendríamos que hacer es ahorrarle la mesa de negociación que le incomoda", ha dicho el líder de los republicanos, que ha recordado que la existencia de una mesa implica "el reconocimiento de un conflicto político".
"Defenderemos la negociación siempre, de gobierno a gobierno, en todos los ámbitos, dentro de la sociedad catalana y con la comunidad internacional que nos pide constantemente que estemos dispuestos a negociar", ha añadido Junqueras, que ha dicho que están centrados en trabajar para acumular fuerzas y construir complicidades para hacer posible un nuevo referéndum de autodeterminación. Asimismo, ha insistido en que la amnistía es la única herramienta que impedirá que los tribunales sigan haciendo política "en servicio a la extrema derecha": "Es la mejor herramienta para acabar con la represión porque depende de la voluntad del poder legislativo".
Libertad vigilada
En la misma jornada que los republicanos han celebrado en la sede de Calabria ha participado la secretaria general de ERC, Marta Rovira, además de los expresos políticos Raül Romeva, Carme Forcadell y Dolors Bassa. Rovira, desde Ginebra, ha insistido también en la vía de la amnistía para parar la represión, que desmoviliza el movimiento y hace que las ideas no se puedan defender en iguales condiciones que las otros proyectos políticos. "Estamos represaliados y para hacer política tenemos que superar el exilio, la prisión y la amenaza. Reivindicamos el fin de la represión porque tenemos derecho como cualquier otra a defender el que creemos mejor para la ciudadanía", ha proclamado, y ha acusado el estado español de usar cualquier elemento para represaliar los movimientos políticos independentistas.
También ha hecho referencia al reciente informe del Consejo de Europa que, por segunda vez, le dice al estado español que tiene "muchas cuestiones pendientes". "Le pide al gobierno español que se ponga de una vez por todas. Reconoce el primer paso de los indultos pero dice que no es suficiente porque son parciales y no devuelven los derechos civiles y políticos a las personas", ha añadido. Según la secretaria general de ERC con los indultos "no se acabó absolutamente nada" y por eso este miércoles el partido hace un acto para pedir el fin de la "represión política". Rovira ha recordado que el presidente Sánchez se comprometió a resolver el conflicto político. "No sabemos qué pensar, si está acomplejado o no tiene valentía. Si no tiene suficiente valor para erigirse como alternativa democrática a la derecha más desbocada a Europa y el estado español. Nosotros seguiremos en el camino de la amnistía y la autodeterminación", ha añadido.
Por su parte, los expresos políticos han recordado como los indultos no son un retorno de la libertad, puesto que si bien es cierto qua han permitido la salida de la prisión, los exconsellers y la expresidenta del Parlament siguen en una libertad vigilada y revisable, y sobre todo con un lastre encima: las inhabilitaciones que no permiten que puedan volver a sus trabajos en los frentes educativos y/o a las instituciones. Más allá de su situación invidual, han reivindicado este acto como una acción para dar visibilidad a la "represión colectiva" que sufre la ciudadanía catalana, tanto con los represaliados que tienen causas judiciales abiertas como por los ataques contra la lengua o contra los acuerdos que toma el Parlament. "Mucha gente pregunta si ha pagado la pena la prisión. La respuesta es que sí, porque hemos entendido la prisión como una herramienta política. Fue necesario afrontar un juicio y una condena para demostrar que estaban equivocados", ha cerrado Romeva.