El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha pedido en una entrevista por escrito a la Ser desde la prisión de Lledoners un Govern de concentración para hacer frente a la sentencia del juicio a los líderes independentistas.
"Sería bueno que el gobierno de Catalunya represente tanto como sea posible el 80% de la sociedad catalana que está en contra de la represión", ha afirmado coincidiendo con otras voces republicanas como las de Roger Torrent o Pere Aragonès. El jefe de los republicanos, que ha afirmado que de la sentencia espera "justicia", también cree que no se tiene que tener miedo a unas elecciones anticipadas. Además, ha reiterado que los republicanos han defendido y defenderán el diálogo y ha lamentado que la confrontación por parte del Estado "existe porque se niega a hablar y a sentarse en una mesa de diálogo".
En opinión de Junqueras, por las mismas razones que sería bueno un gobierno de concentración ("representar el 80% de la sociedad catalana que está en contra de la represión, a favor de una solución negociada y de que los ciudadanos de Catalunya puedan decidir su futuro con su voto"), también habría que aprobar los presupuestos "con una mayoría parlamentaria lo más amplia posible". Y ha añadido: "en todo caso, estoy seguro que ningún demócrata tendría que tener miedo al voto de los ciudadanos expresado en unas elecciones. El mejor aval siempre es el del conjunto de la ciudadanía".
Junqueras, que ha asegurado que "valió la pena cumplir con el mandato popular de las urnas", ha afirmado que a través del proceso a los líderes independentistas "el mundo ha podido ver los déficits democráticos" del estado español. Y lo ha calificado todo de "pasos imprescindibles en el camino hacia la democracia y la república".
Además ha considerado que todo lo que han hecho hasta ahora "era necesario, sobre todo por la falta de alternativas ofrecidas por parte del Estado". Ha reconocido, sin embargo, que todo "no ha sido suficiente", por lo cual ha invitado a "persistir". En este sentido ha afirmado que "nadie ha claudicado ni renunciado al objetivo de la República", objetivo que ha calificado de "demanda razonable, democrática, legítima e, incluso, irreversible".
"Tardará más o menos, pero no tengo ninguna duda que ya hace tiempo que hemos superado el punto de no retorno", ha añadido el jefe de los republicanos catalanes, que ha vuelto a pedir una mesa de negociación con el gobierno estatal "sin líneas rojas". En todo caso, sí ha alertado de que el camino hacia la República "no será fácil, ni rápido ni indoloro".