Los partidos enfilan la antepenúltima vuelta antes de cruzar la meta. PSC, Junts y ERC avanzan enganchados disputándose el primer cajón del podio. En este último tramo, cada resbalón es una oportunidad para el rival. Los de Oriol Junqueras optan por evitar maniobras demasiado arriesgadas que puedan hacerles descarrilar, pero han encontrado una vía para desmarcarse de uno de los adversarios, que es el patinazo del candidato del PSC en el debate de TV3 de este martes, cuando se negó a someterse a un test Covid. El líder de los republicanos ha subido de marcha, insinuando que si Salvador Illa no quiso hacerse la prueba es porque quizás se ha vacunado en secreto.
¿Por qué el señor Illa, que pretende ser presidente de Catalunya con los votos de la extrema derecha, se negó a que le hicieran una prueba PCR antes del debate en TV3, que tenía que servir para garantizar la salud a todos los que participaban, de todos los trabajadores de aquel medio? ¿Es que quizás el ministro de Salud aprovechó su cargo para vacunarse"?. Junqueras ha exigido con contundencia "saber la verdad", porque "los ciudadanos tienen derecho a saberlo antes de emitir su voto".
Cuando este martes ha trascendido la noticia, Illa se ha justificado argumentando que sólo se somete a PCR o antígenos cuando lo indican los protocolos sanitarios, es decir, en caso de contacto estrecho con un positivo o si presenta síntomas. Y que ayer no se daba ninguna de estas circunstancias. Además, preguntadas directamente, fuentes del PSC han explicado que "Salvador Illa se vacunará cuando le toque por grupo de edad tal como establecen los protocolos de vacunación".
Ya por la mañana, Pere Aragonès ha denunciado que todos los candidatos fueron al debate pensando que todos se habían hecho una prueba, como se había acordado, y que se han enterado de que Illa no quiso a través de los medios.
Los votos de Vox bajo el brazo
ERC, pues, ha encontrado una nueva vía para atacar al PSC mientras persiste en la que ya ha venido alertando los últimos días. Que los socialistas "vienen con los votos de Vox bajo el brazo". Lo ha vuelto a repetir Aragonès, que ha recordado como a pesar de haberle preguntado directamente, Illa nunca ha negado su disposición a aceptar sus votos. "Ha dicho que no negociará", ha resaltado, que es lo mismo que hizo Colau con los votos gratis de Valls, utilizarlos para gobernar mirando hacia otro lado.
El partido más valiente
El mitin de esta noche se ha celebrado en el corazón de la Catalunya central, a pocos minutos del centro penitenciario de Lledoners. Raül Romeva y Oriol Junqueras han vuelto directos del acto a la prisión. Ambos se han referido a su condena. Romeva, asegurando que si la Fiscalía todavía no ha recurrido el tercer grado es "porque han entendido que el impacto que tiene encerrarnos en campaña no les conviene".
Junqueras se ha expresado con más vehemencia señalando que "ERC es el partido que ha tenido más represaliados y más gente en la prisión", aunque nunca ha tenido "ni un solo caso de corrupción". El exvicepresident ha dado una explicación: "porque siempre hemos sido el partido más ambicioso de todos, el más valiente, lo que nunca se ha escondido".
Los republicanos mantienen la apuesta para presentarse como el catch-all party de Catalunya para movilizar los indecisos. La misión, atraer el voto útil. De los independentistas, pero también de la gente de izquierdas.
El espejo Guardiola
Después de muchos días alejada de los grandes focos y centrada más en peinar el territorio, la número dos de la lista ha hecho de telonera de Romeva, Junqueras y Aragonès. Hija del Bages, Laura Vilagrà ha reflejado el proyecto de ERC al estilo Guardiola. "Es el que más trabaja, se esfuerza, analiza fortalezas y debilidades de su rival. ¿Os suena? Como ERC, hemos leído bien el partido y hemos trazado una buena estrategia ganadora", ha apuntado a la exalcaldesa de Santpedor, la cuna de Pep Guardiola.
Investidura y presupuestos
Los republicanos han ido administrando la información que iban aportando a lo largo de la campaña. Y no ha sido hasta la recta final que han puesto encima de la mesa la propuesta de ligar la negociación de la investidura a la de los presupuestos. Aragonès lo apuntó en el debate de TV3 de este martes, y lo ha seguido desarrollando este miércoles. Según ha explicado, su intención es que, por primera vez en muchos años, la investidura no sea de infarto y se tenga que decidir en el último minuto, sino que sea fruto de un acuerdo sólido que vaya acompañado del compromiso de aprobar las cuentas. La idea es que en el mismo acto se presentaran los dos pactos, por la investidura y por los presupuestos.