Junts ha acusado a la Moncloa de haber vetado a sus representantes en la mesa de diálogo. El secretario general del partido, Jordi Sànchez, ha advertido esta tarde en rueda de prensa que no cambiarán los nombres que han propuesto para asumir este papel después de que el president, Pere Aragonès, había dejado clar horas antes que no los aceptaba argumentando que los miembros de la parte catalana tienen que formar parte del Govern.

Junts había notificado a Aragonès esta mañana que sus representantes serían, además del vicepresident, Jordi Puigneró, el vicepresidente de Junts, Jordi Turull, la portavoz en el Congreso, Míriam Nogueras, y el mismo Jordi Sànchez.

Las diferencias sobre este tema han obligado a suspender la reunión del Consell Executiu a fin de que los consellers de ERC y de Junts se reunieran cada uno por su parte para evaluar la situación. El resultado final ha sido que el Govern ha aprobado una delegación donde sólo se han ratificado los nombres propuestos por ERC, es decir, Aragonès y los consellers Laura Vilagrà y Roger Torrent.

 

"No dejamos sillas vacías"

"Nosotros no dejamos sillas vacías, en todo caso a nosotros no se nos ha dejado entrar", ha advertido Sànchez, que ha denunciado a lo largo de la rueda de prensa que ha ofrecido este tarde que si Junts no forma parte de la delegación del gobierno es porque han sido vetados.

El líder de Junts ha intentado descargar de responsabilidad de Aragonès y ha negado que se esté poniendo en cuestión el liderazgo del president de la Generalitat, no obstante, ha admitido que es un "mal presagio haber aceptado esta censura".

Aunque Aragonès ha emplazado públicamente a sus socios a plantear una propuesta de nombres integrada por miembros del Govern, Sànchez ha asegurado que no corregirán su propuesta porque "sería una mala praxis aceptar las condiciones y exigencias que el gobierno español plantea".

"Estaremos fuera hasta que nos vuelvan a abrir la puerta. No nos quieren porque les somos incómodos", ha sentenciado, además de ironizar que no harán "como los hermanos Marx: si no les gusta esta propuesta tenemos otro".

Exigencias de Junts

Sànchez ha insistido en las exigencias que habían planteado para comunicar los nombres de sus representantes, como por ejemplo, conocer la agenda de la mesa de diálogo; ha reprochado que no han sabido el día en qué se celebraba la reunión hasta que ayer lo anunció Sánchez en una entrevista a TVE; ha recordado que habían reclamado saber si el presidente español asistirá al encuentro -"y no sabemos todavía en qué formado se sentará, si vendrá a arremangarse y negociar o a hacerse una foto", ha añadido-, y ha reprochado de nuevo las especulaciones que los últimos días ha habido desde la Moncloa sobre su presencia.

En este contexto ha situado la decisión de Junts de no revelar sus nombres hasta conocer los términos y asistentes del encuentro, los cuales, ha asegurado, estaban decididos desde hacía semanas.

No afectará al ejecutivo

A pesar de la tensión que ha vivido el Govern y el llamamiento del presidente a la lealtad de los socios, Sànchez ha pronosticado que esta situación no tendrá repercusiones al entendimiento dentro del ejecutivo.

No obstante, ha insistido en que el acuerdo que firmaron ERC y Junts no especifica que los miembros de la mesa de diálogo tengan que formar parte del Consell Executiu, como reclama el president, que se dejaba en manos de cada organización decidir a sus representantes; y ha puntualizado que a pesar de las preferencias expresadas por Aragonès en el sentido de circunscribirlo a nombres del Govern, su partido había dejado claro que no estaban de acuerdo. "No había ningún acuerdo verbal, no quiero desmentir al presidente, pero no había ningún acuerdo verbal", ha puntualizado en relación a esta cuestión.

De hecho, ha recordado que el mes de marzo dirigentes de ERC propusieron que el presidente de Esquerra, Oriol Junqueras, estuviera en la mesa de diálogo y que la negativa del Gobierno español a la presencia del líder republicano ha provocado el veto a la propuesta de Junts de sentar en la negociación a Jordi Sànchez y Jordi Turull.

 

En la imagen principal, el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, en un momento de la rueda de prensa de esta tarde / Efe