La intervención inicial del candidato a la investidura, Pedro Sánchez, ha causado enfado en Junts per Catalunya por la manera en que se había referido, por ejemplo, a la amnistía como una "medida de gracia" y de "perdón". Por este motivo, tras reanudar la sesión, la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ha trasladado este malestar al número tres del PSOE, Santos Cerdán. Y así también lo ha querido visibilizar Nogueras durante su discurso desde el atril de la cámara baja española, instando a Pedro Sánchez a aclarar si cumplirá con el acuerdo. "Hoy usted tenía que empezar a desmentirnos a los que decimos que no cumple los acuerdos, que su palabra no vale y que solo le interesa el poder. Querría darle un consejo: no tiente a la suerte porque no le funcionará". En esta parte introductoria, la dirigente juntaire ha alertado al socialista de que su intervención no había sido "valiente" y que la manera de hacerlo "habría sido respetando aquello que se ha acordado y haciendo honor a aquello que se ha escrito". Por eso, Junts ha lanzado un aviso claro: "Para decir y hacer lo mismo que hace cuatro años, Junts no le hace ninguna falta".
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A pesar de estos avisos, Nogueras ha defendido el acuerdo alcanzado con el PSOE y ha querido destacar que justamente este permite que las cosas "se hagan diferente a partir de ahora": "No aparece la palabra diálogo y sí que lo hace la palabra negociación, no se habla de perdón ni de medidas de gracia porque eso fueron los indultos y la amnistía es otra cosa, es la desjudicialización de la política". En este contexto, la diputada de Junts en el Congreso ha hecho referencia a la división entre el PSOE y el PP por este acuerdo: "La cuestión no es si España tiene un gobierno más o menos progresista, más o menos de izquierdas o más o menos reformista; lo que explica la histeria de ciertos sectores es el problema catalán, y lo que no se digiere y se combate por tierra, mar y aire es que ahora se atrevan a abordar el tema catalán de manera directa". "Señor Sánchez, ¿está dispuesto a abordar esta cuestión, tal como establece el acuerdo que hemos firmado?", ha lanzado Míriam Nogueras. Para la juntaire, lo que resulta "disruptivo" del acuerdo es que se reconozca la existencia de un conflicto político y que es "histórico".
La estabilidad de la legislatura, condicionada a los "avances y cumplimientos"
En los avisos al PSOE, Míriam Nogueras también ha mencionado la "tentación" que los socialistas han tenido a menudo de "hacer creer que el conflicto se había superado y que lo habíamos dejado atrás: engañaban y lo sabían, de manera que ahora toca actuar en consecuencia y dejar de esconder el problema". "Si hoy estamos aquí, es para hacer que los grandes consensos que ha recogido el Parlament a lo largo de la historia sean atendidos, por eso hemos definido que el único límite sea el Parlament. A fin de que la legislatura avance, Catalunya necesita que pasen cosas diferentes y se culmine un acuerdo que cambie la historia", ha sentenciado. Por todo ello, Nogueras ha reivindicado que el acuerdo claro está: "La estabilidad queda sujeta a los avances y cumplimientos de los acuerdos que resulten de las negociaciones en los dos ámbitos permanentes, el ámbito del reconocimiento nacional (donde planteamos el referéndum) y el ámbito de déficit y limitaciones del autogobierno (donde pondremos encima de la mesa la cesión del 100% de los impuestos)". Y todavía ha sido más contundente para afirmar que "si los cambios no son posibles y no se avanza, no daremos apoyo a ninguna iniciativa que presente su gobierno".
Durante el discurso, la parlamentaria juntaire ha dado un repaso a los diversos acontecimientos de "represión política, judicial, militar y policial" contra Catalunya desde 1714 y es en este contexto que ha avalado la negociación para "resolver el conflicto por la vía política". "Hemos escogido una manera diferente con la cual el catalanismo pactaba normalmente con España: en vez de asegurar la estabilidad de entrada, habrá que ganársela acuerdo a acuerdo; en vez de hacer una lista de la compra siempre incumplida e insatisfecha, queremos hablar del supermercado entero; teníamos que pasar de una relación de sumisión a una de igual a igual". Míriam Nogueras también ha hecho bandera que el pacto no supone "ninguna renuncia" y que el compromiso de Junts con la independencia sigue bien vivo: "Hoy, escribimos una página más que nos acerca a nuestro objetivo. Somos conscientes de los riesgos y las dificultades, pero tenemos una oportunidad para avanzar y sabemos de dónde venimos y hacia dónde vamos". "No queremos romper nada ni queremos que nos rompan, lo que queremos es lo mejor para nuestra nación", ha sentenciado.
Pedro Sánchez se compromete a cumplir con el acuerdo
En su turno de réplica, Pedro Sánchez ha calibrado la dimensión del malestar de Junts y se ha apresurado a confirmar el "compromiso del PSOE" y el suyo personal para "cumplir el acuerdo". "Creo que gana la política entendida como negociación y acuerdo, que es lo que hemos suscrito", ha enfatizado. Según Sánchez, el panorama que se abría después de las elecciones dejaba dos posibilidades: "O nos manteníamos invariables en nuestras posiciones e íbamos a segundas elecciones, o apostábamos por una negociación sincera y honesta a pesar de las diferencias". El candidato a la investidura ha apuntado que "las diferencias se tienen que entender como un elemento esencial de la democracia" y ha destacado que hay un hecho que los une con Junts: "El progreso y la estabilidad de Catalunya". "Nadie puede negar que vivimos un tiempo de esperanza para Catalunya, estamos dando pasos hacia la desjudicialización y hemos abierto un nuevo tiempo juntos que tenemos el deber de aprovechar y trabajar para que la Catalunya del hoy y el día siguiente resuelva el conflicto". En este sentido, Sánchez ha pedido "no frustrar" esta "nueva etapa" y ha reconocido "el derecho a defender todos los postulados" que tiene Junts "con toda la dignidad". "Me reafirmo en el compromiso de la oportunidad histórica", ha añadido. El socialista ha concluido que la posición de su partido es "la contraria" a la mantenida por el PP: "Ignoraron las demandas de la sociedad catalana y alimentaron la discordia levantando un muro de desconfianza. No hacer nada no es ninguna estrategia ni solución y daremos pasos para resolver definitivamente el conflicto".