El congreso de Junts ha apostado por eliminar aristas en relación al debate sobre la continuidad del pacto con ERC en el Govern. En la ponencia política, que se ha aprobado por unanimidad, se han retirado las enmiendas que se habían presentado imponiendo una consulta a las bases sobre este tema, algunas de las cuales reclamaban la convocatoria este mismo año. El texto originar plantea que una vez se haya cerrado la auditoría sobre funcionamiento del acuerdo de gobierno con ERC se evaluará como responder sin descartar ninguna medida y "se planteará a las bases la posiblidad de continuar o no en el gobierno o tomar otros tipos de iniciativas adecuadas a la situación".
Diferentes enmiendas reclamaban un redactado más directo sobre la voluntad de llevar a cabo la consulta o incluso hacerla este mismo año. Según el portavoz de la comisión, Aleix Sarri, la ponencia aprobada permite replantear el acuerdo de gobierno si no se avanza en la línea que plantea Junts y ponerlo "potencialmente" a consulta de la militancia.
Evaluar acuerdos
Por lo que respecta a los acuerdos en las entidades supramunicipales, otro de los puntos que había provocado debate, a raíz del acuerdo que mantiene Junts con el PSC en la diputación de Barcelona, se ha acordado que antes de las elecciones se evaluará caso por caso el funcionamiento de los acuerdos en estos organismos. El acuerdo no establece cuándo se hará la evalución a pesar de que sí deja claro que habrá que escuchar a los representantes de cada territorio.
Por lo que respecta a la política de acuerdos municipales, al igual que se ha acordado en la comisión municipales, la ponencia política establece que se respetará la autonomía local siempre que el pacto permita defender el programa de Junts. No obstante, puntualiza que mientras haya exiliados y represaliados, Junts pactará de forma mucho prioritaria con partidos que defiendan el derecho a la autodeterminación y condenen la represión.
La ponencia política es, según el portavoz de la comisión donde se ha debatido, Aleix Sarri, un manual para activar el 1-O y hacer posible la independencia. En ella se señala que la mesa de diálogo es perjudicial porque desmoviliza internamente y silencia en el exterior; advierte que los cinco años del 1-O tiene que ser un punto de inflexión en el camino a la independencia; avala la hoja de ruta del Consell per la República; i se afianza la política de Junts respecto del Gobierno. "El PSOE no es mejor que el gobierno del PP y la estabilidad del Gobierno no es un objetivo de Junts", ha remachado.