Este martes, por segunda vez, el Consejo de Asuntos Generales de la Unión Europea ha abordado la carpeta de la oficialidad de la lengua catalana en la UE, pero una vez más no se ha hecho ninguna votación. Aunque la petición sigue sin aprobarse, España insiste en que la cuestión no está aparcada y que no hay vetos por parte de ningún estado miembro de la UE. La oficialidad del catalán en el marco comunitario europeo es uno de los acuerdos que el PSOE y Junts rubricaron para que estos últimos dieran apoyo a la candidatura de Francina Armengol para la presidencia del Congreso, y hoy por hoy sigue atascado. Por eso, la formación juntaire ha reaccionado este mediodía a este nuevo aplazamiento a través de un comunicado donde, a pesar de constatar avances, exigen a Pedro Sánchez una fecha para la aprobación definitiva de la cuestión: "Hay que intensificar los esfuerzos diplomáticos y el Gobierno tiene que ser consciente de que estamos en tiempo de descuento".
En este sentido, hay que recordar que el acuerdo de Junts con el PSOE para la Mesa del Congreso de los Diputados no se cerró definitivamente hasta que los juntaires recibieron la documentación que certificaba que el Gobierno había registrado la petición al Consejo de la Unión Europea para que el catalán, el euskera y el gallego fueran lenguas oficiales de la Unión Europea. La primera vez que se habló de esta cuestión fue el pasado 19 de septiembre, donde algunos países manifestaron sus reticencias para aprobar esta cuestión. Entonces, el Gobierno situó el catalán como prioritario y, a lo largo de estas semanas, el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, ha intensificado los encuentros y los contactos con sus homólogos europeos para desencallar la aprobación. A pesar de ello, este martes tampoco ha sido posible, siendo Letonia y Lituania los que más escépticos se han mostrado. La próxima reunión del Consejo antes de que expire el plazo para investir a un presidente del Gobierno —vence el 27 de noviembre— e ir a elecciones será el 15 de noviembre, una fecha que puede ser clave.
De hecho, por eso Junts hace alusión al hecho de que el Gobierno se sitúa "en tiempo de descuento" e insisten en que hace falta ya una fecha para la aprobación definitiva del catalán en la Unión Europea si los socialistas no quieren que las negociaciones para investir a Pedro Sánchez fracasen. En el mismo comunicado, el partido detalla que estarán "atentos a que se produzcan novedades en las próximas semanas".
Sin oposiciones a continuar con el procedimiento
Después de la reunión del Consejo de este martes, José Manuel Albares ha afirmado ante los medios de comunicación que ningún país se ha negado a continuar con el procedimiento para poder aprobar la oficialidad del catalán en la Unión Europea. El ministro en funciones también ha añadido que, en esta ocasión, han intervenido varios estados para posicionarse explícitamente al lado de España en este tema. Uno de los motivos por los cuales algunos países muestran dudas es por el riesgo de que haya un efecto contagio de peticiones para la oficialidad de otras lenguas, hecho que Albares rechaza: el caso del catalán, gallego y euskera es "único" y, si se pide la aprobación de otras lenguas minoritarias, no saldrá adelante si el estado miembro afectado no quiere.
Este martes, el ministro de Asuntos Exteriores de Letonia, Krisjanis Karins, ha sido muy tajante contra esta petición y se ha mostrado "convencido" de que, en estos momentos, no se ampliará el número de lenguas oficiales de la Unión Europea. De hecho, ha reprochado dedicar tiempo a esta carpeta cuando está en juego la "posición estratégica" de Europa.