Nuevo giro de guion en el Congreso de los Diputados. La Cámara Baja acogía hoy la comparecencia de Carmen Calvo después de que el Consejo de Ministros la haya propuesto como presidenta del Consejo de Estado, el órgano consultivo supremo del Gobierno. Antes de poder ejercer su nuevo cargo, Calvo tenía que intervenir en la Comisión Constitucional para que esta emitiera un dictamen sobre “si aprecia su idoneidad o la existencia de conflicto de intereses”. Inicialmente, Junts comunicó al PSOE que rechazaba el nombramiento de Calvo, pero el partido de Carles Puigdemont ha acabado votando a favor.

Desde la formación juntaire, evitan hacer declaraciones públicas, pero reconocen que su cambio de postura se debe a una negociación con el PSOE hasta última hora. Esquerra Republicana, que también ha dado su ‘sí’, no comenta sus razones y se limita a evidenciar que los cuatro partidos independentistas (sumando aquí a Bildu y el PNV) han seguido el mismo camino. Finalmente, el Congreso ha considerado que Calvo es idónea para el cargo con 19 votos a favor y 18 en contra: le han dado apoyo los partidos que integran el Gobierno (PSOE y Sumar) y sus socios de investidura (ERC, Junts, Bildu y el PNV), mientras que se han opuesto el PP, Vox y UPN (que forma parte del Grupo Mixto).

Calvo toma el relevo de Magdalena Valerio, que ocupaba el cargo desde octubre del 2022. El camino que siguió Valerio ha sido lo mismo que Calvo: cuando fue propuesta era diputada del PSOE y, previamente, había formado parte del Consejo de Ministros. Calvo fue vicepresidenta y ministra de la Presidencia entre 2018 y 2021 (de 2004 a 2007 había sido ministra de Cultura con José Luis Rodríguez Zapatero) y Valerio fue ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social entre 2018 y 2020. No hace mucho tiempo, el pasado mes de noviembre, el Tribunal Supremo revocó el nombramiento de Valerio como presidenta el Consejo de Estado a raíz de un recurso presentado por la fundación Hay Derecho alegando que no reunía el requisito de “jurista de reconocido prestigio”.

Carmen Calvo en 2021: “La amnistía suprimiría el Poder Judicial”

Desde hace meses, Carmen Calvo ha sido una figura controvertida, especialmente en sus palabras relacionadas con el procés. En 2021, por ejemplo, aseguró que la amnistía “no es planteable en un Estado constitucional y democrático, porque sería suprimir literalmente uno de los tres poderes del Estado, que es el judicial”. Asimismo, Calvo también ha sido contundente a la hora de hablar del presidente Carles Puigdemont, a quien se refirió como “alguien a que se pasa por el forro la justicia española”. “España es una de las grandes democracias del mundo y, evidentemente, viajas o te vas, pero no te exilias”, llegó a afirmar.